El crimen cometido por el régimen de Marruecos la tarde del sábado 24 de octubre de 2010, cuando el ejercito marroquí disparo contra un coche todo terreno de la marca NISSAN / PATROL, en el cual fue asesinado un menor de edad NAYEM GAREH (menos de 14 años) y cinco heridos en estado grave, y estando en un territorio vigilado por la ONU mediante la MINURSO para garantizar el respeto del alto el fuego entre las dos partes del conflicto, más la forma con la que fue enterrado en media noche del siguiente día de su muerte, de una manera muy discreta y en un lugar desconocido para la opinión pública como para su propia familia , excepto el padre que fue llevado de su casa a las 23h hacia una oficina donde firmó un documento sin verlo porque es casi ciego y sin leerlo por ser analfabeto, dándole una indemnización, más vale llamarla un soborno bajo amenazas decoloradas por promesas sin garantías, al ser entregada en la sombra de la noche para evitar el riesgo de los testigos, de unos 13.500 EUROS .
Cuando Marruecos invadió el Sahara Occidental en los finales de octubre de 1975, miles de saharauis fueron detenidos, torturados y desaparecidos. De estos casi ya no habla nadie, pese los centenares de familias que aun desconocen el paradero de sus familiares. El ejercito marroquí arrojo civiles desde helicópteros, enterró decenas vivos en la provincia de Lamseyad y una entidad desconocida hasta el momento en la localidad de Gdayria, mas los centenares que murieron en centros secretos de detención a causa de la tortura, las enfermedades y la mala alimentación. Añadiendo a todo ello el bombardeo por el NAPALM y el Fósforo Blanco a los campamentos de UM DRAIGA.
Por lo que podemos decir que Marruecos cometió un genocidio en el Sahara Occidental, y todos los responsables siguen gozando de libertad, fortuna y poder.
Pero lo que sucede actualmente es muy distinto, porque en el los últimos casos (sólo tomando como ejemplo en el caso de Hamdi Lembarki en el año 2005 y Nayem Gareh en el año 2010 ), aparece con toda claridad las pruebas mas indiscutibles del TERROR DE ESTADO. En el caso del primero Hamdi Lembarki, los dos policías que implicados en su muerte fueron detenidos y juzgados en el tribunal de Segunda Instancia en El Aaiun y condenados a 10 años de prisión firme. Cuando pasaron dos años y cuatro meses, en la apelación del mismo tribunal, la condena se disminuyo a 2 años, por lo que fueron liberados en el mismo día. Y según la ley en Marruecos, tales policías ya no tendrán derecho en ejercer su trabajo en el cuerpo policial. Y todo fue lo contrario, tales policías ejercen actualmente su labor en el interior de Marruecos como si no hubiera pasado nada.
En el caso del segundo Nayem Gareh, Marruecos ni siquiera investigó en la muerte, y lo enterró en un tiempo record para que desaparezcan todas las huellas del crimen, y quizá en el futuro próximo aparezcan las actas policiales surgiendo que la causa de la muerte ha sido por un simple accidente.
La ODS 2° Generación hizo múltiples llamamientos a la opinión pública internacional para llamarle la atención sobre la finca más segura de la impunidad en nuestra actualidad. Y teme que evolucione este Terrorismo de Estado de Marruecos contra los ciudadanos indefensos hasta el nivel de trasladarse de CRIMENES DE ESTADO individuales a CRIMENES DE ESTADO colectivos.
Y para la ODS 2° Generación la única prevención para hacer fin a esta cadena ascendiente del Derecho Internacional Humanitario, es establecer un organismo internacional en el territorio para la observación y la notificación sobre la situación de los Derechos Humanos en el territorio del Sahara Occidental.
El Aaiun / Sahara Occidental: 28 de octubre de 2010
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