Foto. El abogado Luis Mangrané y el periodista Gervasio Sánchez |
Viajaba a El Aaiún desde Madrid. Al hacer
escala en Casablanca fue interceptado por la Policía marroquí
El abogado Luis Mangrané denunció hoy que
la policía marroquí le ha impedido viajar al Sáhara Occidental, formando parte
de una delegación aragonesa de observadores de los derechos humanos, bajándolo
de un avión y expulsándolo de Marruecos en otro avión que partirá mañana.
Mangrané, del Observatorio aragonés para el
Sáhara Occidental, viajaba a El Aaiún con un vuelo desde Madrid que hacía
escala en Casablanca, acompañado del fotógrafo y periodista Gervasio Sánchez,
al que iba a introducir en el territorio saharaui, que Mangrané conoce desde
hace siete años.
Sin embargo, una vez dentro del avión de
Royal Air Maroc, unos policías marroquíes de paisano se presentaron ante él y
le comunicaron que existe «una orden del gobierno marroquí que le impide la
entrada en el país en aplicación de la Ley de Extranjería».
Conminado a abandonar el avión, la policía
lo ha escoltado hasta un hotel donde pasará la noche para partir mañana martes
en el primer vuelo a Madrid.
En cuanto a Sánchez, sobre quien no pesa
ninguna orden de expulsión, abandonó voluntariamente el avión al no tener
objeto su visita al territorio saharaui, y regresará mañana con Mangrané, según
ha explicado.
El abogado mostró su extrañeza porque, si
bien no esconde sus simpatías en favor del independentismo saharaui, sí ha
podido viajar en los últimos siete años «sin mayores problemas» tanto al
territorio saharaui como a ciudades marroquíes para asistir a saharauis
enjuiciados en tribunales marroquíes.
Hasta el momento, ninguna fuente oficial
marroquí ha dado su versión de los hechos, aunque expulsiones de este tipo de
activistas extranjeros pro saharauis son relativamente frecuentes y no siempre
se ofrecen explicaciones públicas.
El Observatorio Aragonés para el Sahara
recuerda que Marruecos es «una fuerza ocupante ilegal e ilegítima en el Sahara
Occidental desde 1975, con innumerables resoluciones de la justicia
internacional y de Naciones Unidas en contra de las violaciones de Derechos
Humanos y del expolio que esta potencia ocupante ejerce sobre el territorio no
descolonizado del Sahara».
«Un pueblo que vive desde hace cuarenta
años dividido por un muro que separa a su gente entre los Campamentos de
Refugiados de Tindouf y los Territorios Ocupados del Sahara Occidental, donde
la represión y las violaciones de Derechos Humanos están a la orden del día»,
concluyen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario