sábado, 2 de marzo de 2019

Ahmed Brahim Ettanji: "Nuestra apuesta contra la violencia marroquí es actuar pacíficamente”. HERALDO


Ahmed Brahim Ettanji: "Nuestra apuesta contra la violencia marroquí es actuar pacíficamente”. periódico HERALDO
Ahmed Brahim Ettanji (1988) nació en El Aaiún y es presidente de Equipe Media, un medio que intenta romper el bloqueo informativo marroquí.
¿Cuándo y por qué se funda Equipe Media, el medio de comunicación que usted dirige en el Sahara Occidental?
En 2009, hace diez años, con el objetivo de superar el bloqueo informativo impuesto por las autoridades marroquíes que ocupan nuestra tierra. Lo formamos un grupo de activistas, periodistas y juristas.
¿Reciben ayuda financiera europea o española?
Hemos recibido cámaras y ordenadores como donaciones y ayuda económica por parte de un organismo sueco para rodar un documental titulado ‘Tres cámaras robadas’, que ha ganado varios premios en festivales internacionales. Existen leyes marroquíes que criminalizan la financiación exterior.
¿Cómo se vive en los territorios ocupados por Marruecos?
Es un infierno diario bajo un bloqueo militar y policial permanente cuyo objetivo principal es abortar cualquier protesta a favor de la independencia. Sufrimos continuos allanamientos, marginación social y laboral. Desde 2005 un millar de saharauis ha sido encarcelado, miles de personas han sufrido tratos inhumanos y degradantes y torturas y unos veinte ciudadanos han sido asesinados.
¿Ustedes trabajan con periodistas extranjeros?
Intentamos ayudar a informadores extranjeros que tienen que trabajar en la clandestinidad. También preparamos material audiovisual e informes periodísticos para medios internacionales.
¿Ha sido detenido alguna vez? ¿Cuál ha sido el trato recibido?
He sido detenido más de quince veces en mi vida. Los golpes y las patadas son permanentes y siempre te mantienen con los ojos vendados en lugares clandestinos. A algunos detenidos se les han arrancado las uñas y otros han sido violados con palos o botellas de cristal. Estas torturas han sido denunciadas durante los juicios, pero la fiscalía marroquí siempre actúa como cómplice del Estado y jamás abre una investigación.
¿Hay posibilidades de que los jóvenes saharauis quieran utilizar las armas a corto plazo?
Nuestra apuesta contra la violencia marroquí siempre ha sido actuar pacíficamente. Desde el alto el fuego decretado en 1991 siempre nos hemos manifestado sin violencia, pero es cierto que algunos jóvenes se sienten silenciados por la comunidad internacional y preferirían volver a coger las armas.
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea acaba de dictaminar que ningún acuerdo comercial con Marruecos puede incluir al Sahara Occidental sin el consentimiento de los saharauis. ¿Es un triunfo para ustedes?
Ha sido una gran victoria. Según el derecho internacional es un territorio colonizado por España y ocupado por Marruecos. Pero Francia y España actúan como sus principales valedores ante la Unión Europea.
¿Entonces no hay diferencia entre la política de España y Francia?
Ninguna. Todas las decisiones tomadas por ambos países han perjudicado al pueblo saharaui desde hace décadas. En la última visita a Marruecos el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha avalado y defendido los acuerdos de pesca a pesar de su ilegalidad. En la votación del Parlamento Europeo sobre este mismo tema, España jugó un papel muy efectivo como abogado de un país torturador.
¿Ha habido avances desde el nombramiento del expresidente alemán Horst Köhler como enviado especial de la ONU para el Sahara Occidental?
Ha conseguido, con el apoyo de Estados Unidos, que se inicie un nuevo ciclo de negociaciones directas entre Marruecos y el Frente Polisario en Ginebra en diciembre pasado, con una segunda ronda prevista para el mes de marzo de este año. Ha presionado a Marruecos para que se presente con un plan alternativo a su ya reiterativa propuesta de autonomía. En cambio, la política exterior española tiene con frecuencia gestos de complicidad con un país que ocupa ilegalmente un territorio y que viola sistemáticamente nuestros derechos. Se omite, en los contactos con Marruecos, cualquier referencia al conflicto saharaui.

No hay comentarios:

Publicar un comentario