sábado, 8 de enero de 2011

Conferencia sobre el drama de las libertades en los territorios saharauis ocupados en Alfaz del Pi





EL DRAMA DE LAS LIBERTADES INDIVIDUALES Y COLECTIVAS EN LOS TERRITORIOS OCUPADOS DEL SAHARA OCCIDENTAL, TEMA A DEBATE EN LA LOCALIDAD ALICANTINA DE ALFAZ DEL PI

La brutal represión ejercida, el pasado 08 de noviembre de 2010, antes, durante y después del violento desmantelamiento del campamento de Gdeim Izik, situado a 15 kms al este de El Aaiún, capital del Sahara Occidental contra la inerme población saharaui que vive en los territorios ocupados por Marruecos por parte del ejército, la policía, la gendarmería marroquíes que azuzaban a su vez a unas hordas vandálicas de colonos marroquíes terminó convirtiéndose en una auténtica limpieza étnica. Esta lamentable ola de represión puso de actualidad el conflicto del Sahara Occidental.

El acto que tuvo lugar el día 7 de enero de 2011, en el Centro Cultural de la localidad alicantina de Alfaz del Pi (45 kms al norte de Alicante), se inscribe dentro de esas innumerables muestras de solidaridad que han tenido lugar por doquier para denunciar la ola de represión que se vivió y se sigue viviendo en los territorios ocupados del Sahara Occidental por parte de Marruecos. El citado acto contó con la presencia de varias personalidades de la vida política, cultural, de la sociedad civil así como representantes del movimiento de solidaridad con la causa saharaui en el Levante español entre los que cabría citar: Sr. Felipe Briones, Secretario General de la Plataforma Internacional de Juristas por el Sahara Occidental, José Reverte, jurista y miembro de la citada plataforma, representantes de las asociaciones de Benidorm, Altea, Elche, San Vicente del Raspeig además de un nutrido público. El acto contó también con la presencia de El Mami Amar Salem, Presidente de la Organización Saharaui Contra la Tortura en Dajla, Vicepresidente de CODESA y uno de los iconos de la Intifada saharaui junto con el Embajador saharaui en Misión para la India, Mohamed Limam Mohamed Ali.

El principal propósito del acto fue hacer un repaso de la historia del conflicto del Sahara Occidental para poder entender en cierta medida la dimensión del drama de los derechos humanos que se vive en los territorios ocupados del Sahara Occidental por parte de Marruecos; lo que permitió denunciar esas violaciones, pedir que caiga todo el peso de la Ley sobre los responsables de esas violaciones de los derechos humanos y que no quedaran impunes, ya que algunas de las mismas se podrían catalogar de delitos de lesa humanidad; y por último lograr que las victimas se sientan arropadas en todo momento frente a los invasores marroquíes.

El Mami Amar Salem recordó durante su intervención que el Sahara Occidental (la antigua Provincia 53 del territorio español) lleva desde 1975 siendo víctima de una tragedia humana, y que gracias a los esfuerzos de las autoridades saharauis, de muchos simpatizantes de la causa saharaui que los hay por doquier, se está logrando que se rompa el silencio impuesto sobre las fechorías del Gobierno marroquí.

El activista saharaui de los derechos humanos, que vivió en carne propia la brutalidad de la represión marroquí, enfatizó en que centenares de saharauis fueron detenidos, y obligados a enfrentar juicios injustos y siguen en prisión en los centros de detención marroquíes, en los que se practican con total impunidad los métodos más crueles de tortura física y psicológica. Todo el territorio ocupado continúa estando bajo un cerco militar y un bloqueo informativo total, al tiempo que las autoridades marroquíes impiden el acceso normal al Territorio de las ONGs, medios de comunicación y observadores internacionales.

El activista saharaui de derechos humanos terminó lanzando un llamamiento para que se redoblen los esfuerzos para poner fin al calvario de los saharauis que viven los territorios ocupados mediante la aplicación de un derecho tan fundamental como es el derecho a la autodeterminación, de que hay que seguir denunciado de la forma más enérgica las violaciones flagrantes de los derechos humanos, ya que no hacer nada no es ninguna opción.


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