El 20 de mayo de 1973, la
primera acción del Ejército Popular de Liberación Saharaui, significó para el
mundo, el estallido de un conflicto que se había intentado ocultar, al que ya
nadie podía darle la espalda. El pueblo saharaui, como decía su líder más
significado, Luali Mustafa Sayed, había demostrado que existía como tal y que
estaba dispuesto y decidido a alcanzar su independencia como todos los pueblos
y Países africanos después de más de 100 años de colonización. La ONU reconoció
al Frente Polisario como único y legitimo representante del Pueblo Saharaui y,
en tanto que movimiento de liberación nacional contra el colonialismo.
En las postrimerías del
régimen anterior, tras años de dilación de la descolonización del territorio
saharaui, los gobernantes españoles precipitan los acontecimientos con la
entrega del Sahara a Marruecos y Mauritania, pactada de forma vergonzosa en el
llamado Acuerdo de Madrid del 14 noviembre de 1975. Además de injusta, dejamos
a todo un pueblo en manos de sus vecinos, desatendiendo nuestros más
elementales deberes hacia la población. Los firmantes de dicho acuerdo
infravaloraron la gran combatividad y resistencia del pueblo saharaui, su
capacidad de lucha y sacrificio, y su sentido del coraje y de la dignidad.
Hoy ya nadie puede ignorar
que, lentamente aunque con firmeza, la larga marcha del pueblo saharaui va
abriéndose camino dentro y fuera de sus fronteras. La última Resolución del
Consejo de Seguridad -2099(2013), aprobada en su sesión 6951a, celebrada el 25
de abril último, se detiene en ..." la situación de los Derechos Humanos
en el Sahara Occidental y en los campos de Tinduf, y alienta a las partes a
trabajar con la comunidad internacional para desarrollar y aplicar medidas
independientes y creíbles para asegurar el pleno respeto de los derechos
humanos, teniendo en cuenta las obligaciones pertinentes en el marco del
derecho internacional"... Pero esta es insuficiente, porque alarga el
statu quo de la ocupación, el exilio, la represión y el expolio de sus riquezas
naturales, con la presencia de la
MINURSO (Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sahara Occidental),
sin competencias para la supervisar la violación permanente de los DDHH.
¿desde cuándo Marruecos ha tenido
respeto por el derecho internacional?
El mismo día de su aprobación,
sus fuerzas de represivas, reprimían a la población que salía pacíficamente a
pedir libertad y justicia. Los desmanes y abusos que comete Marruecos
diariamente, se repiten con resultados de lesiones, heridos, detenciones y
vejaciones...de la población que vive bajo un verdadero Estado de terror
continuo, cuando se manifiestan pacíficamente o cuando se encuentran en sus
casas, donde los marroquíes entran violentamente sin órdenes de registro.
Estamos seguros que Marruecos
no "mejorará la promoción y protección de los derechos humanos en el
Sahara Occidental"...y en estas últimas semanas lo hemos comprobado de manera inequívoca; no
se puede confiar en que este régimen vaya a cambiar de actitud sin que exista
una presión internacional y algún mecanismo de control que le obligue a
respetar el derecho de libertad de manifestación, expresión y reunión...etc.
dejando de actuar impunemente al margen de las recomendaciones de la última Resolución
del Consejo de Seguridad. Naciones Unidas, que está fallando (una vez más) en
el Sáhara Occidental, demostrando que sus normativas se aplican selectivamente,
en función de los intereses políticos y comerciales de algunas de las potencias
que marcan la agenda del Consejo de Seguridad.
Por todo ello debemos seguir
exigiendo, hoy más que nunca a la Naciones Unidas el control por parte de la
Minurso de los DDHH., organizando visitas de observación y acompañamiento al
Sahara ocupado, siendo testigos directos y denunciando las agresiones que se
cometen diariamente; y a nuestro
Gobierno exigirle que asuma de una vez por todas su responsabilidad, que le
exige mayoritariamente la sociedad, no pueden seguir acordándose del pueblo
saharaui solo en momentos electorales o cuando están en la oposición, para más
tarde ofrecerles como moneda de cambio con vistas a obtener o salvaguardar
intereses, abiertamente ilegales, con la potencia agresora de este pueblo.
Marruecos puede seguir
hablando de "Autonomía", últimamente ya hablan de
"Federación" o "Confederación" o "Estado Libre
Asociado"...van poco a poco mejorando su "ofrecimiento"...todo
el tiempo que desee, confundiendo la solución de un conflicto de
descolonización inacabado, con un problema de descentralización o
regionalización interna, o nuevas propuestas sin fundamento. Los
"Länder" en Alemania o una "Autonomía" en el Estado
español, o Puerto Rico libremente asociado a EEUU...pero se equivocan, esto es
otra cosa. Cualquier fórmula que pretenda imponerse, lejos de facilitar una
salida al conflicto, no hace sino poner en riesgo la paz y la estabilidad del
conjunto de la región, mas en la situación que vive hoy el Sahel.
El Pueblo saharaui ha
resistido a lo largo de estos largos años de ocupación ilegal de su territorio;
tras años de guerra, en 1991, bajo los auspicios de la ONU y de la OUA, el
Reino de Marruecos y el Frente Polisario, acordaron un Alto el fuego y resolver
el conflicto por la vía pacífica, suscribiendo un plan de Paz o de Arreglo. Han
pasado más mas de veintidós años, y sigue Marruecos insistiendo en desvirtuar
el problema, poniendo obstáculos hasta el final, con continuas maniobras para
evitar aplicar la legalidad internacional, que establece claramente la
necesidad de que el pueblo saharaui pueda decidir libremente su futuro; si
quiere integrarse en Marruecos, si quiere ser una Autonomía dentro del Reino de
Marruecos, o si quieren ser independientes, ratificado a través de la
celebración de un Referéndum justo, libre e imparcial.
La solución del conflicto, la
descolonización final del Sahara Occidental, es urgente y necesaria, ya que
abrirá nuevas perspectivas no solo para el Pueblo Saharaui, sino también para
el Pueblo marroquí y para el resto del Magreb, y traerá estabilidad política y
cooperación entre las distintos pueblos y naciones.
Hoy en esta fecha de gran
significado histórico, hay que recordar a los que han luchado y siguen luchando
por la justicia y la libertad de este Pueblo hermano, que es por la justicia y
la libertad de todos nosotros, y que día a día construyen con su esfuerzo los
lazos de amistad y solidaridad entre los pueblos y que ya nunca podrán borrar.
José Taboada Valdés, Presidente
de la Coordinadora Estatal de Asociaciones de Solidaridad con el Sahara. CEAS-Sahara