El Consejo debatirá el próximo
lunes una propuesta de resolución presentada por Estados Unidos para renovar el
mandato de la Minurso que de aprobarse daría por primera vez a esa misión
facultad para supervisar la situación de los derechos humanos.
HRW envió hoy una carta a los
quince miembros del Consejo en la que critica que Minurso realice actividades
de desminado o patrullas fronterizas pero no pueda actuar "ante la
violencia policial, los tribunales injustos o las restricciones al derecho de
reunión".
"Ya es hora de poner fin
a esa anomalía", dijo el director de HRW en Naciones Unidas, Philippe
Bolopion, quien pidió que la Minurso también pueda supervisar la situación de
los derechos humanos en los campos de refugiados saharauis en Argelia.
HRW considera que hace
"demasiado tiempo" que la ONU debería poder supervisarlo y reiteró
hoy que ayudaría proteger los derechos humanos y" dificultaría los
intentos de las partes de distorsionar sus demandas de abusos para avanzar en
sus agendas políticas".
"Los miembros del Consejo
no pueden dejar pasar esta oportunidad única de lograr que la Minurso se sitúe
en línea con otras misión de paz modernas, diseñadas bajo la premisa de que los
derechos humanos son una parte integral del trabajo de la ONU", concluyó
Bolopion.
La propuesta estadounidense ha
sido enviada en los últimos días a varios países del Consejo, según señalaron a
Efe varias fuentes diplomáticas, que en todo caso evitaron pronunciarse sobre
las posibilidades de éxito de la iniciativa.
El mandato de la Minurso
concluye el próximo 30 de abril y la intención de Estados Unidos es que su
proyecto de resolución se debata el próximo lunes y que después sea sometida a
votación el 25 de abril.
Para ser aprobada, la
propuesta debe recibir los votos a favor de nueve de los 15 miembros del
Consejo de Seguridad y no ser rechazada por ninguno de los cinco países con
derecho a veto (Rusia, China, Reino Unido y Francia, además de Estados Unidos).
Marruecos, miembro rotatorio
del Consejo pero sin derecho de veto, ha emprendido una ofensiva política y
diplomática para frenar la iniciativa de EE.UU., que ve como "un atentado
contra la soberanía nacional que traerá consecuencias nefastas para la
región".
El Frente Polisario se han
centrado en los últimos años en dos cuestiones: hacer que la Minurso tenga
también competencias en derechos humanos y reclamar que la explotación de los
recursos naturales beneficie ante todo a la población local saharaui.
La Minurso, establecida en
1991, es prácticamente la única misión de la ONU aprobada en los últimos dos o
tres decenios que no tiene entre sus competencias supervisar la situación de
los derechos humanos en el territorio en el que opera, según recordó una
fuente.
En su informe anual sobre el
Sahara, presentado la semana pasada, el secretario general, Ban Ki-moon, instó
a "una mayor colaboración a nivel internacional con respecto a la
situación en el Sahara Occidental y los campamentos de refugiados de
Tinduf".