El
desplazamiento hasta la cárcel, que en un principio era de carácter
estrictamente humanitario, tal y como ha informado la misma delegación, ha
despertado gran hostilidad por parte de la delegación, no sólo hacia la prisión
que les impidió su entrada, también contra el Gobierno marroquí
Carmelo
Ramírez, consejero del cabildo de Gran Canarias; Claudia Morales, diputada del
Parlamento de Canarias; Josefa Milán, concejala del Ayuntamiento de Telde; y
Teresa Morales, ex diputada del Parlamento de Canarias han viajado el pasado lunes
hasta Rabat para visitar a los presos saharauis por el caso Gdeim Izik. Una
visita que no ha podido formalizarse debido a la negativa de la Prisión de Sale
1.
El
desplazamiento hasta la cárcel, que en un principio era de carácter
estrictamente humanitario, tal y como ha informado la misma delegación, ha
despertado gran hostilidad por parte de la delegación, no sólo hacia la prisión
que les impidió su entrada, también contra el Gobierno marroquí. “Denunciamos
el encarcelamiento de militantes y activistas saharauis”, reclama la delegación
en una nota de prensa.
La liberación
de los presos de Gdeim Izik no es la única reivindicación de la delegación
canaria. “Exigimos el cese de la ilegal ocupación de Marruecos en el territorio
saharaui”, reza la nota de prensa. Según los miembros de la delegación, “la
única intención que tiene Marruecos es doblegar la voluntad de los activistas
saharauis que luchan por los derechos humanos”. Y aprovechan la ocasión para
exigir llevar a cabo, con urgencia, la resolución de la Organización de
Naciones Unidas sobre el Sáhara Occidental y celebrar el referéndum de
autodeterminación.