CODESA. 9 SEPTIEMBRE, 2014
El defensor de los derechos humanos y preso
político saharaui “Abd Lkhalak Lmarkhi” sigue en huelga de hambre desde el 14
de agosto de 2014 en la prisión local de Ait Melloul / Marruecos, en protesta
por las condiciones pésimas y la política continua de la administración
penitenciaria reflejada en privarle de su derecho a tener contacto con el mundo
exterior, visitas, periódicos, libros, y el derecho a la nutrición y el
tratamiento médico.
Dado que esta huelga de hambre abierta ha
llegado a los veinticinco días, causando problemas graves de salud que pueden
afectar incluso la vida misma y la integridad física del preso político
saharaui ya que sufre de varios dolores en todo el cuerpo.
Dado que la administración carcelaria hasta
la realización de este informe no ha procedido a abrir un diálogo serio con el
preso político saharaui ” Abd Lkhalak Lmarkhi ” sobre sus demandas legítimas y
justas, garantizadas por las cartas y pactos internacionales de los derechos
humanos.
Dado que la administración carcelaria va
procrastinando y persistiendo en su negligencia constante del estado de salud
del preso político saharaui ” Abd Lkhalak Lmarkhi “, hecho que podría dar lugar
a consecuencias graves, debido a las complicaciones graves de esta huelga de
hambre, situación parecida a la muerte del estudiante de izquierda marroquí
“Mustafa Almzayani” en la prisión local de Fez / Marruecos después de 72 días
de huelga de hambre.
El buró ejecutivo del Colectivo de
Saharauis Defensores de Derechos Humanos CODESA, por un lado señala el peligro
que rodea la vida del preso político saharaui ” Abd Lkhalak Lmarkhi “, asume
plena responsabilidad a la administración de la prisión local de Ait Melloul y
por consiguiente la Delegación General de Prisiones y Rehabilitación de las
consecuencias fatales de esta huelga abierta hambre, y por otro lado exige al
Estado marroquí una intervención urgente e inmediata con el fin de salvar su
vida y lograr todas sus demandas además de garantizar su derecho a un juicio
justo a través del retiro de todas las acusaciones penales y de delito menor
dirigidas en su contra, ya que fueron falsificadas por oficiales de la policía
judicial y los distintos servicios de inteligencia como venganza de su postura
sobre la cuestión del Sahara Occidental y sus actividades pro derechos humanos
como secretario general de la Comisión Saharaui de la Defensa de los Derechos
Humanos en Glaimim / sur de Marruecos.
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