Redacción: EIC Poemario por un Sahara
Libre, 26 de abril de 2018
El pasado 25 de abril de 2018 se celebraron
en la Universidad de Alicante las III Jornadas El Sáhara Occidental y las
Universidades Públicas Valencianas en la Universidad de Alicante.
Mesa “Reflexiones sobre la situación
actual del proceso de paz en el Sahara Occidental”
Moderada por Jaume Ferrer Lloret, profesor
de la Facultad de Derecho de la Universidad de Alicante, contó con la presencia de dos
destacados juristas, expertos en la cuestión saharaui.
Juan Soroeta, Profesor de Derecho
Internacional Público de la Universidad del País Vasco, destacó que se está
viviendo un momento espectacular en el conflicto saharaui. Instó a los
saharauis a actuar sin esperar del resto de países involucrados, “la solución
está en vuestras manos”. Calificó el momento como “emocionante”, en el que “por
fin se está moviendo algo”. Marruecos vive un gran nerviosismo, “la situación
se les está yendo de las manos”. El Polisario debe seguir en la línea actual,
controlando el aspecto económico y el militar, con los acontecimientos que se
están viviendo en El Guerguerat.
El profesor Soroeta opinó que el mandato de
la MINURSO no sirve para mucho más que para mantener el statu quo actual. “No
hay que esperar nada positivo del Consejo de Seguridad”, afirmó, recordando que
los diferentes gobiernos españoles han “avalado y apoyado” en realidad la
ocupación marroquí.
Por su parte, Felipe Briones, fiscal
Anticorrupción de Alicante, comenzó su intervención afirmando que “sin el
concepto de corrupción no se puede entender el conflicto del Sahara Occidental”.
Recordó que quedan 17 territorios no autónomos en el mundo, de ellos el más
grande es el Sahara Occidental y del que menos datos oficiales se conocen, sólo
en el Sahara Occidental se producen violaciones sistemáticas de los derechos
humanos y en el resto la administración de iure y de facto coinciden, no así en
el caso del Sahara Occidental.
Briones recordó que en el año 1958 el
Sahara Occidental pasó a ser provincia y a considerarse territorio español.
Según el Consejo de Estado hay que distinguir entre territorio nacional y
territorio español, caso del Sahara en aquellos años, que es tangible, secundario,
transmisible y su separación del estado no hace tambalear la esencia del
estado. Fue por tanto considerado territorio español, no nacional, así tuvo
lugar la independencia de Guinea, la entrega de Ifni a Marruecos, y en cuanto
al Sahara Occidental, España tenía la obligación de llevar a cabo la
descolonización del territorio. España no tenía la potestad de transferir la
administración del territorio a terceros países. Los Acuerdos Tripartitos son,
por tanto, nulos.
Marruecos no se encuentra incluido en el
listado de potencias administradoras de los territorios no autónomos. España
sigue siendo la autoridad de iure. Lo que vincula el Sahara Occidental con
España es el principio de territorialidad. España sigue teniendo competencia en
los delitos cometidos en el Sahara Occidental. Esa vinculación penal española
sigue vigente. Marruecos carece de jurisdicción, soberanía y administración
sobre el Sahara Occidental. No puede enjuiciar a los activistas saharauis en
los territorios ocupados, por tanto.
Felipe Briones consideró que la causa vive
uno de sus mejores momentos. Marruecos ha fracasado en todas sus últimas
maniobras, ha errado en su entrada en la Unión Africana para intentar
desestabilizar a los saharauis, el rey está enfermo y se habla de que va a
abdicar en su hijo menor, el país vive graves problemas internos, hay pobreza,
problemas en el ejército, corrupción endémica, narcotráfico, inseguridad en la
región propiciada por Marruecos que cada vez pierde más posiciones en su eterna
pugna con Argelia. “Marruecos es un socio poco fiable mientras siga ocupando el
Sahara Occidental”.
El jurista concluyó destacando que el
dossier del Sahara cada vez va cobrando mayor fuerza. “El declive diplomático
de Marruecos ha llegado a tal punto que han llegado a amenazar con llegar a una
guerra con el Polisario alegando que los saharauis tienen estructuras
administrativas en los territorios liberados”, concluyó.
La Delegada Saharaui para España, Jira
Bulahi, afirmó en esta línea que “Marruecos está en una situación en que se
encuentra acorralado.
Mesa “La Universidad de Tifariti. El
caso de la Escuela de Enfermería Ahmed Abdel-Fatah”
El profesor Juan Carlos Gimeno, de
la Universidad Autónoma de Madrid, comenzó remontándose a 2009 cuando en un
seminario celebrado en los territorios liberados PONER EL NOMBRE, se
establecieron tres puntos, sobre el uso del español y la posibilidad de solicitar
la creación de una Real Academia de Lengua Española Saharaui, la recuperación
de los territorios liberados y la importancia de la creación de una Universidad
Saharaui, proyecto que se ha materializado.
Para una Universidad como la de Tifariti,
de un estado que aún está en proceso de creación, es necesario un
acompañamiento. En la formulación de una universidad saharaui hay que
enfrentarse a toda una serie de eventualidades, tener en cuenta la
idiosincrasia saharaui y resultar útil para las aspiraciones saharauis.
El pasado mes de octubre de 2017 se celebró
en los campamentos de refugiados saharauis una edición la Universidad Popular
de los Movimientos Sociales, con la participación de la Universidad de
Tifariti, ARTifariti, con la participación del antropólogo social y pensador e Boaventura
de Sousa Santos, creador del Foro Social Mundial. Dentro de la dinámica del
diálogo de saberes y las epistemologías del diálogo los colectivos implicados,
el activismo social que genera conocimiento, junto con artistas e intelectuales
críticos, formularon cuestiones y preguntas divididos en diferentes grupos, que
más tarde fueron puestas en común. Los debates contaron con gran diversidad
geográfica, con participantes de México, España, Francia, además de saharauis
de los campamentos, territorios liberados y territorios ocupados, de la
diáspora, instituciones, asociaciones, activistas, artistas y universidades. Se
realizaron dos días de trabajo y conclusiones.
Jatari Hamudi, rector de la Universidad
de Tifariti, anunció que el próximo mes febrero de 2019 tendrá lugar en los
campamentos una importante conferencia internacional alrededor de la
Universidad de Tifariti, con más de 53 universidades de todo el mundo
invitadas.
Desde el inicio de la proclamación de la
República Saharaui se ha dado una crucial importancia al tema de la educación.
“Un pueblo culto jamás será colonizado”, afirmó el rector. A pesar de ser un
pueblo refugiado, los saharauis han llegado a niveles educativos a los que
jamás se llegaron durante la colonización.
El rector de la Universidad de Tifariti
recordó la obligatoriedad de la enseñanza en los campamentos de refugiados,
donde ya se puede estudiar Secundaria, Formación Profesional y Educación
Especial, aunque como dijo Jatari “la tarea no es fácil”.
En 2012 se creó finalmente la Universidad
de Tifariti. Actualmente dispone, entre otras, de las Escuelas de Enfermería,
Pedagogía, Informática y Periodismo.
El reto de crear una universidad en un
campamento de refugiados se enfrenta a numerosos obstáculos. Al problema del
reconocimiento de títulos se une el de las necesidades de financiación, de
motivación para profesores y alumnos, problemas de infraestructuras y de buen
acceso a Internet para la educación a distancia.
La Universidad de Tifariti tiene varios
convenios de cooperación con diferentes universidades. Se han firmado 53
convenios, 30 de ellos con universidades españolas. La mayoría son convenios
marco, pero lo que se necesita es que sean convenios específicos.
“Somos conscientes de que vamos a llegar a
nuestros objetivos”, concluyó el rector Hamudi.
El delegado saharaui para la Comunidad
Valenciana, Habibulah Mohamed, recordó a aquella generación de los años
70 que “renunció al sueño universitario para luchar por la independencia de
nuestro pueblo”. Habibulah reflexionó sobre que debieron abandonar sus estudios
porque era su “deber” centrarse en la lucha colectiva “en detrimento del
proyecto personal”. Recordó que aquella generación puso la formación académica
que les había dado tiempo a adquirir “al servicio de nuestro pueblo, 40 años
después, no me arrepiento”. En palabras del delegado saharaui, “la universidad
no sólo forma sino que construye y moldea al individuo”. También en sociedades
que viven el temor de ser aniquiladas. “Nuestra existencia como pueblo está
amenazada desde hace más de 40 años, por eso la universidad puede tener un
papel determinante en nuestra lucha por la libertad”, concluyó Habibulah.
Finalizó la mesa con la intervención de la
profesora Reyes González, de la Facultad de Económicas y Empresariales, que
habló sobre la experiencia de cooperación de la Universidad de Alicante con la
Escuela de Enfermería Ahmed Abdel-Fatah, cuyo origen data de 1992, y ahora
incluida en la Universidad de Tifariti. Desde 1997 profesores de la Universidad
de Alicante colaboran con la Escuela. La profesora destacó que ni en los años
de mayor incidencia de la crisis en los recortes, la Universidad de Alicante
dejó de participar en sus proyectos de cooperación con los campamentos en mayor
o menor medida.
Con respecto al abandono de los diferentes
gobiernos españoles al empeño saharaui de mantener el idioma español como
símbolo de identidad y resistencia, la Delegada Saharaui para España, Jira
Bulahi, puntualizó que “los saharauis han llevado el español al Parlamento
Africano”.
Mesa: “La literatura saharaui:
resistencia, solidaridad y mujer”
Por la tarde tuvo lugar la mesa dedicada a
la cultura y literatura saharaui. La escritora y periodista Conchi Moya
presentó una comunicación sobre la Generación de la Amistad Saharaui, grupo de
escritores saharauis que escribe en español. Se centró en el papel del español
como un factor más de identidad del pueblo saharaui, elegido y reivindicado por
ellos mismos. “No es sentido como una imposición, sino que se ha elegido como
un aspecto diferenciador con respecto a los países de su entorno”. El español
de los escritores saharauis se nutre de su realidad cotidiana y de sus
tradiciones milenarias. La literatura saharaui en español es una literatura “de
resistencia, de reivindicación de la identidad y está condicionada por la
situación del pueblo saharaui”, y tiene vocación de ser leída y publicada.
La escritora destacó que el grupo
Generación de la Amistad saharaui, constituido en 2005, lo hizo “con la
decidida misión intelectual de dar a conocer la causa saharaui y reivindicarla
a escala internacional desde la literatura, construyendo un firme compromiso
con la tierra y con su gente”. La obra de la Generación de la Amistad saharaui
está inspirada en su mayor parte en su causa, tiene contenido social y de
denuncia. Como temas inevitables el paso del tiempo, la lucha por recuperar la
tierra, el canto a la tradición beduina, el exilo, el destierro, la diáspora,
el abandono. La obra de los escritores saharauis en el exilio está íntimamente
ligada a su cultura y han elegido ser puente entre la poesía saharaui
“tradicional” en hasania y la poesía en español. Los escritores en el exilio
forman parte activa del proyecto de recuperación de la memoria oral realizado
por profesores de la Universidad Autónoma de Madrid, en colaboración con el
Ministerio saharaui de Cultura e investigadores saharauis. Se trata de un
diálogo intergeneracional y un diálogo entre las dos lenguas.
La escritora finalizó destacando los lazos
con la literatura latinoamericana, debido a la influencia de escritores de
Latinoamérica en los escritores saharauis en español y la publicación de tres
antologías de poesía saharaui en Argentina, Venezuela y Uruguay. También
resaltó la firme vocación africana de la literatura saharaui, con la
participación en diferentes iniciativas de literatura africana en español.
Durante su intervención se ayudó de los
escritores saharauis y miembros de la Generación de la Amistad Limam Boicha y
Bahia Awah para que recitaran algunos versos del grupo.
El antropólogo y escritor Bahia Mahmud
Awah habló sobre el culturicidio de la ocupación marroquí en el Sahara
Occidental, “un genocidio cultural con el que se pretende eliminar el
patrimonio material e inmaterial saharaui”, con el intento de hacer desaparecer
la identidad del pueblo saharaui, sus valores y rasgos históricos. En los
territorios saharauis ocupados, las autoridades de ocupación persiguen la
lengua de los saharauis, el hasanía, un híbrido de las africanas zenaga o
senhaya, wólof y el árabe, totalmente diferente del dialecto marroquí que se
impone a los niños en los colegios. Otra forma de apropiación es la edición en
hasania, por parte del ocupante, de una traducción de “El principito”, de
Antoine de Saint-Exupery, una labor de sabotaje cultural que intenta presentar
el hasanía como un idioma que forma parte “del gran mosaico cultural de
Marruecos”. Este intento de “apropiación y asimilación” lo están haciendo también
con los cuentos y la narrativa oral saharaui.
También se ataca a los nombres y la forma
de construir los apellidos los saharauis. En los territorios ocupados las
autoridades marroquíes no permiten que se inscriban niños con determinados nombres como Lala, Mulay, o
Sidi, reservados para la familia real, pero que para los saharauis son nombres
habituales. Por otra parte Marruecos, ha destruido “la nomenclatura de
construcción de los apellidos saharauis”, eliminando el Uld/Mint (nombre del
padre) Uld (nombre del abuelo) e imponen apellido inventados “que puede ser el
nombre de un barril, de una roca, de una región…”. Citó el caso de Sukeina Mint Yedehlu, una presa desaparecida
durante 13 años, Sukeina Yedehlu, a quien Marruecos impuso el apellido “El
Idrisi”, completamente desvinculado de su familia y de su padre, uno de los
grandes poetas saharauis en hasania.
Por otra parte recordó el ataque a los
símbolos de la identidad nacional saharaui como la prohibición de instalar
jaimas en las ciudades, suburbios o
playas, o la campaña de eliminación de los santuarios o puntos de culto
saharauis conocidos como “lemsid”, una pequeña extensión de arena rodeada de
piedras donde acuden los saharauis a orar y debatir, “una humilde mezquita al
aire libre, abierta a todos”.
Como casos relevantes de destrucción del
Patrimonio material histórico saharaui, Bahia Awah citó los restos de la
mezquita de Smara, en la que no se invierte y que se cae piedra a piedra.
Pretendieron hacer lo mismo con la iglesia Nuestra Señora del Carmen, en Dajla
ocupada, levantada en la época de la metrópoli, que los saharauis cuentan como
parte de su patrimonio histórico. La iglesia fue defendida por el activista
saharaui Bouh Semlali. Sin embargo, no se pudo salvar el Fuerte de Dajla, un
edificio histórico de la época colonial construido a finales del siglo XIX por
Emilio Bonelli y destruido por el ocupante marroquí en 2004.
Por su parte el escritor saharaui Limam
Boicha, miembro de la Generación de la Amistad, destacó como los
refugiados, perdidos, con la autoestima baja necesitan ayuda para levantar
cabeza. Algo así sucedió con la Generación de la Amistad, con la ayuda recibida
de escritores y profesores como Ricardo Gómez, Gonzalo Moure, Ana Rossetti,
Juan Carlos Gimeno o Antonio Polo, presentes todos en aquella reunión de julio
de 2005 donde se constituyó el grupo. Limam destacó la importancia de la
memoria, recordando las palabras de la Premio Nobel Toni Morrison “los
oprimidos también tenemos derecho a reivindicar y reescribir nuestra propia
historia”. “Estamos en ello”, afirmó Limam.
A continuación, el escritor saharaui habló
del Bubisher, la red de bibliobuses y bibliotecas fijas en los campamentos de
refugiados saharauis, proyecto que comenzó en 2008. Recordó la respuesta de
Gonzalo Moure a una noticia sobre que el gobierno español había vendido una
importante partida de armas a Marruecos. “Yo me apunto a un bombardeo” (de
libros y de cultura) fue el título del artículo del escritor Gonzalo Moure.
Limam recordó que la cultura saharaui es eminentemente oral y el libro siempre
se vio “como un objeto sagrado”. La idea de Bubisher es trabajar con las niñas
y los niños “para que aprendan a convivir con los libros”. Según el escritor
saharaui, la mejor campaña de publicidad del proyecto fue la elección del
nombre, bubisher, el pajarito que trae las buenas noticias para los saharauis.
Limam destacó que “los primeros niños que empezaron a participar en el Bubisher
ya tienen diez años de tradición lectora”.
Limam hizo un recorrido por la historia del
proyecto. En Smara se hizo la primera biblioteca fija, el “Nido del Bubisher”,
y las bibliotecas fijas ya han llegado a más wilayas, a petición de los propios
refugiados. Actualmente hay tres bibliotecas fijas con tres bibliobuses y
pronto habrá una en el campamento de Dajla. “Queríamos que las bibliotecas
tuvieran libros nuevos, los libros que cualquier padre de aquí querría para sus
hijos o para su barrio”. El Bubisher funciona también como editorial. El primer
libro editado fue “Ritos de jaima”, escrito por Limam Boicha. Recientemente han
publicado “El niño de luz de plata”, de Gonzalo Moure, escrito por niños
lectores de la biblioteca de Smara a través de un juego de preguntas y
respuestas.
La mesa finalizó con la reflexión de Lehbib
Ali Salem, delegado saharaui para Alicante, que reflexionó que “sin cultura no
tenemos identidad. El Frente Polisario apostó decididamente por conservar la
cultura y darle entidad en la conciencia de los ciudadanos saharauis”.
Durante las jornadas universitarias se ha
recordado a los desaparecidos América de Furundarena, presidenta de la
Asociación Dajla de Amigos del pueblo saharaui y Antonio Pomares, Profesor de
Secundaria muy vinculado a la cultura saharaui. Bahia Awah recordó por su parte
a Bujari Ahmed
No hay comentarios:
Publicar un comentario