Los participantes en la VI RUTA SOLIDARIA
POR LOS NIÑOS Y NIÑAS SAHARAUIS se han ganado con creces hasta el último euro
aportado por sus patrocinadores
Más de 150 personas han participado en la
VI Ruta solidaria por los niños y niñas saharauis para conseguir fondos para el
programa “Vacaciones en Paz” de Cantabria por el Sáhara. Los participantes han
tenido que hacer frente al viento, la lluvia y el granizo que han compartido
con los escasos momentos de sol los 20 Km del recorrido trazado por el Club de
senderismo “La Cagiga” que, junto al IES Bernardino de Escalante, han sido el
“alma mater” de esta nueva edición de un evento deportivo-solidario que ya se
puede considerar un clásico de referencia en el movimiento solidario de
Cantabria con el Pueblo Saharaui.
El recorrido, con controles de sellado y
avituallamiento en los kilómetros 10 y 15, ha sido completado en su totalidad
por 120 senderistas, y transcurrió por parajes de Laredo, Colindres y Limpias,
a los que la adversa climatología no consiguió restar un ápice de belleza.
Antes de comenzar la marcha en la Plaza de los Pescadores, Jesús Hernández
(Chuchi) se dirigió a los participantes en nombre de la organización para
reiterar el compromiso con la causa saharaui a través del apoyo al programa
Vacaciones en Paz. Seguidamente intervinieron, Charo Losa, primer Teniente de
Alcalde del ayuntamiento de Laredo y Gabriel Herrería, Presidente de Cantabria
por el Sáhara.
Cantabria por el Sahara, que desde hace
años hace posible que niños y niñas saharauis procedentes de los Campamentos de
Refugiados de Tinduf (Argelia) pasen dos meses de verano acogidos por familias
cántabras, será la destinataria de la recaudación obtenida mediante los
patrocinios conseguidos por los participantes, ya que en esta peculiar prueba
no se cobra inscripción, siendo los propios participantes los encargados de
conseguir patrocinadores que abonen por kilómetro recorrido una cantidad
previamente pactada.
La estancia en Cantabria de los niños y
niñas saharauis que participan en el programa de acogida, supone un pequeño
respiro en su dura vida de refugiados, haciendo posible las revisiones y
cuidados médicos que precisen, una alimentación más abundante y variada o el
aprendizaje o refuerzo del español. Todo ello sin perder de vista la
visibilidad que su presencia otorga a la causa del Pueblo Saharaui, ya que no
hay que olvidar que su situación de refugio está causada por la ocupación
marroquí del Sáhara Occidental y la no asunción de sus responsabilidades éticas
y políticas por parte de España y de la ONU, que tras casi 43 años de
ocupación, se ha demostrado incapaz de hacer cumplir sus propias resoluciones a
Marruecos.
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