viernes, 6 de febrero de 2015

El alcalde de Donostia subraya la importancia de que acudan observadores al Sahara Occidental

Los tres abogados saharauis, mas conocidos con su defensa a la población saharaui que vive bajo ocupación marroquí, reunidos con el alcalde de San Sebástian Juan Karlos Izaguirre, Pais Vasco



El alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre, ha dado cuenta este viernes de la visita que durante cinco días ha llevado a cabo al Sahara Occidental, donde ha comprobado in situ la situación de los territorios ocupados por Marruecos y se ha entrevistado con activistas saharauis en ámbitos diversos como los derechos humanos, la cultura, la mujer, la infancia, los recursos naturales o el derecho.
NAIZ|DONOSTIA|06/02/2015
El alcalde también estuvo reunido con la familia de Hassanna Aalia, a quien el Gobierno español ha denegado el asilo. Izagirre, quien antes de ser primer edil ya había viajado a los campamentos saharauis como médico cooperante, ha subrayado que «la causa saharaui tiene un origen político, y aunque la solidaridad es necesaria, es el momento de avanzar y trabajar también desde el ámbito político, ya que la resolución del conflicto vendrá por esa vía».
En ese sentido, ha destacado la importancia de la presencia de delegaciones internacionales en la zona: «Tenemos que acabar con el bloqueo informativo, entrar en la zona y ser testigos directos de lo que ocurre allí, para luego difundir lo que hemos visto y escuchado en El Aaiun».
El alcalde ha subrayado que los saharauis «lo tienen todo absolutamente prohibido: sus símbolos, banderas y jaimas, las reuniones y manifestaciones, la libertad de expresión y asociación, e incluso preguntar dónde se encuentra el hijo que ha desaparecido».
No obstante, ha destacado que «a pesar de 40 años de ocupación y represión el pueblo saharaui sigue siendo un ejemplo de dignidad».
Ha denunciado que la policía marroquí ha seguido sus pasos en todo momento: «Desde el momento en que entramos en El Aaiún, la policía nos ha seguido a todas partes. Estaban en el hotel, en la calle, en las casas de los y las saharauis, en las tabernas... Es evidente que las fuerzas de ocupación no quieren que haya testigos y observadores internacionales».
*Fuente: Donostia.org
En Sahara Occidental están prohibidos los símbolos, banderas y jaimas del pueblo saharaui. Prohibido está cualquier reunión de más de cinco personas, así como manifestarse, asociarse o preguntar por un hijo desaparecido. Se prohíbe la libertad de expresión. El alcalde Juan Karlos Izagirre está conociendo esa cruda realidad más de cerca durante estos días, escuchando testimonios de una serie de saharauis. En sus palabras, en todas las casas hay un preso, un desaparecido, un deportado, un represaliado o refugiado: “Estamos recogiendo decenas de testimonios, y nos damos cuenta de que a pesar de 40 años de ocupación y represión, el saharaui es un pueblo con dignidad y principios”.
Aminatou Haidar, activista por los Derechos Humanos, ha organizado múltiples citas para el alcalde. Tal y como dice la activista, para tratarse de un pueblo tan pequeño, la lista de injusticias es muy larga. Desde la ocupación de 1975, hay 500 saharauis desaparecidos. Haidar es miembro de la asociación CODESA, que trabaja para preservar la memoria colectiva: “Nuestros ejes son ayudar a las víctimas, documentar las infracciones y promover la lucha sin violencia”. Ella es una de las 374 personas liberadas por Marruecos en el alto al fuego de 1991. En esa época, fueron 56 los y las saharauis que murieron en las cárceles.
Y es que la lista de injusticias desde la ocupación de 1975 es larga. Las hermanas de Said Dambar lo saben bien. Su hermano salió de casa de noche hace cinco años y no ha vuelto desde entonces, tal y como han contado Fatimetu y Leila a Juan Karlos Izagirre: “Lo mataron de un tiro, estuvo 3 días en el hospital y 17 meses en la morgue, y nunca nos dejaron verlo; aún hoy seguimos sin saber si está enterrado, y mientras tanto, la policía intenta comprar nuestro silencio”.
Los dos hermanos de Nhabouha Lakhifir llevan ya diez años desaparecidos, desde la Intifada de 2005, en la que desaparecieron él y otros trece saharauis: “Están en cárceles secretas, y hemos sabido, a través de un contacto, que dos de ellos murieron, pero no tenemos forma de saber quiénes están vivos y quiénes muertos”. La asociacion CODAPSO ha denunciado duramente acontecimientos como ese. El activista Hmad Hamad cuenta que hay quienes han permanecido 10 o 12 años en cárceles secretas. En los últimos años, Marruecos ha compensando económicamente a 7.000 de estos saharauis.
Taki el Machdoufi también ha conocido las infracciones de Derechos Humanos en primera persona. Estuvo preso durante dos años sin haber sido juzgado. Es uno de los presos de Agdaim Izik. Tras deshacer el campamento, detuvieron a centenares de saharauis, de los cuales 25 tuvieron un juicio militar, imponiendo la cadena perpetua a nueve de ellos. Hassanna Aalia es uno de ellos. Abdelai Toubali ha explicado a Izagirre que su hermano fue condenado a 25 años de cárcel: “Están en la cárcel de Saleh, a 1.200 kilómetros, lo que resulta un castigo también para los familiares, ya que se alimentan de la comida que les llevamos, y para ello, estamos obligados a alquilar una casa en Rabat”.
Mohamed Fadel Uld Lili tiene claro que el juicio de Gdeim Izik fue una parodia. El es uno de los pocos abogados que ejercen en el Sahara Occidental, junto con Mohamed Bulchaled y Mohamed Lehbib. “El juicio duró nueve días, y fue puro teatro, ya que habían sentenciado antes de que comenzara el proceso. Quedó claro, una vez más, que aquí no hay ni garantías ni justicia”. A día de hoy, existen, por lo que han explicado al alcalde de Donostia, entre 50 y 60 presos políticos, que fueron detenidos sin pruebas, sufren torturas, permanecen incomunicados durante semanas completas, y que están dispersos: “Ser abogado en Sahara Occidental es muy difícil; somos víctimas de la represión y solemos recibir amenazas”.
Izagirre ha informado a los saharauis sobre la situación del conflicto político de Euskal Herria, y compartido con ellos varias reflexiones. Hoy se reunirá con jóvenes, mujeres y desempleados saharauis, entre otros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario