martes, 14 de diciembre de 2010

Los Saharauis, como peces en el agua en Panamá



Entrevista con Hameiduha Ahmed Mohamed. Consejero de la Embajada de la República Árabe Saharaui en Panamá

EXPRESIONES  Diciembre 7, 2010.

Desde que en 1975 España cedió el Sahara Español a Marruecos y Mauritania, el pueblo Saharaui no ha vivido un solo momento de paz ni de libertad.  Lo que en su momento se supuso como la autodeterminación y la definición de un nuevo Estado africano, se convirtió en el inicio de una lucha cuyo final aún no se vislumbra.

La República Árabe Saharaui Democrática (RASD), como la proclama el pueblo que se ubica en el Sahara Occidental, territorio de unos 266 mil kilómetros cuadrados(*), ocupado a la fuerza en su mayor parte, por Marruecos, que reclama soberanía sobre éste; ha alcanzado el reconocimiento internacional de más de 80 Estados, siendo uno de éstos Panamá, primer país americano en reconocer a la RASD –en 1976-, y el que aloja la que fue la primera embajada Saharaui en América –desde 1980-.

Tuve la oportunidad de conversar en persona con Hameiduha Ahmed Mohamed, que desde hace un año es el Consejero de La Embajada Saharaui en Panamá.  El Sr. Hameiduha, una persona accesible, comunicativa y muy amable, con gran disposición y una gentil sonrisa, me recibió para conversar, con seriedad y amenidad, acerca de la realidad del pueblo Saharaui.

Aquí, lo que me contó…

Algo de historia

En 1975,  el Tribual Internacional de La Haya dictaminó que no hay vínculos de ninguna índole entre el pueblo saharaui y el Reino de Marruecos, por lo que la pretendida marroquinidad del territorio no cuenta con base legal y por lo tanto el pueblo de ese territorio es el único que podría determinar su futuro libremente tal como lo señalaban las reiteradas resoluciones de las Naciones Unidas, en las que instaban a España a llevar a cabo una consulta popular en la que el pueblo saharaui se expresara libremente. Tanto Marruecos como España sabían que el ansia de los saharauis era la independencia y la constitución de un Estado libre y soberano en el Sahara Occidental.

Cuando Francisco Franco – dictador de España – estaba en agonía, Marruecos aprovecha la coyuntura para abortar un proceso de descolonización ya iniciado, que llevaba a la independencia total del territorio Saharaui.  Posteriormente, Marruecos y Mauritania invaden el Sahara Occidental, basándose en los nefastos Acuerdos Tripartitos de Madrid de 1975, que entregaban el territorio a estos dos países, Marruecos y Mauritania.  España alegaba que transfería la administración de su excolonia pero no transfería la soberanía, ya que esta solo radicaba en la voluntad de los saharauis.

El 26 de febrero de 1976 termina la presencia colonial española en el Sahara Occidental y al día siguiente, el Frente POLISARIO en representación del pueblo saharaui proclama el nacimiento de la República Árabe Saharaui Democrática, que de inmediato es reconocida por varios países en el mundo.  Mauritania se retiró en 1979, firmando la paz y manteniendo ahora excelentes relaciones con la RASD.  El que queda es  Marruecos, que está haciendo oídos sordos al llamado internacional, pues desde 1991 hay un alto al fuego, que se firmó para dar paso a la realización de un referéndum de autodeterminación que no se ha efectuado porque Marruecos lo ha impedido y dilatado.

“Marruecos persiste en su política anexionista y no quiere escuchar nada de referéndum o independencia.  Ellos ofrecen autonomía, pero no pueden ofrecer eso a un territorio que no les pertenece”.

El pueblo Saharaui ha llevado a cabo una admirable lucha de liberación nacional  hasta septiembre del año 1991 con la firma de la paz, con auspicio de las Naciones Unidas, con el fin de llevar a cabo un referéndum de autodeterminación e independencia.  Podemos afirmar categóricamente que accedimos en un empate técnico en el plano militar, Marruecos a pesar de su superioridad militar y logística, no fue capaz de vencernos.
 
Los sucesos más recientes

El 8 de noviembre, en Kdein Izik a 16 kilometros del Aaiun, la capital ocupada de nuestro país, un grupo de 30,000  personas montaron sus tiendas  como protesta por las deplorables condiciones económicas en las que vivían.  Ante esto, el ejército marroquí interviene, junto a la policía, de manera brutal, causando la muerte de niños y mujeres.  Este acto provoca el repudio internacional de, por ejemplo, el Parlamento Europeo, el Senado Español, gobiernos latinoamericanos, como Panamá; la Unión Africana, y de organismos humanitarios y de derechos humanos internacionales.  Fue un acto fascista, que atentó contra la vida de inocentes indefensos.
 
El conflicto a futuro

Hay un alto al fuego, están los cascos azules de la Naciones Unidas; se está negociando. Recientemente se concluyó una ronda; a mediados  de diciembre y principios de enero habrá más negociaciones.  La RASD quiere agotar la vía del dialogo, pero si la comunidad internacional no presiona a Marruecos, para poner fin a su política de intransigencia, los saharauis no tendrán otra opción que volver a la guerra.  El Frente POLISARIO  celebrará su congreso en diciembre de 2011, en el cual se determinarán las líneas a seguir.   Marruecos debe mostrar voluntad real para llegar a una solución política del conflicto que respete el derecho legitimo del pueblo saharaui a la autodeterminación,  o de lo contrario se volverá a las hostilidades militares, pues no hay otra alternativa posible dada la intransigencia marroquí.

Marruecos cuenta con el apoyo de Francia en el Consejo de Seguridad y ese apoyo lo envalentona y convierte su posición en una especie de “testarudez estúpida”.  Lo que no entendemos es como es posible que la Francia, que proclama ser el país de la libertad, la justicia y la fraternidad, apoya ciegamente a una monarquía de corte feudal y dictatorial que viola los más elementales derechos humanos.

Diplomacia

Seguimos en la búsqueda del apoyo internacional a nuestra causa, la lucha no ha sido solo  militar.  Tenemos presencia diplomática en la mayoría del continente americano, con Embajadas acreditadas en algunos y concurrentes en otros.

En África nuestra presencia es importantísima, pues los grandes países del continente nos reconocen; Nigeria, Sudáfrica, Argelia, Angola, Mozambique y otros.  Además, nos han admitido dentro de la Unión Africana – algo como la OEA en América –, como un país más, y hemos ocupado una vicepresidencia dentro de ese organismo. Marruecos ha sido expulsado de la Unión Africana por haber invadido a la Republica Saharaui.

Actualmente la RASD cuenta con reconocimiento internacional, ya que nuestra causa es justa y loable y las perspectivas son muy alentadoras en el plano internacional basándonos en la legalidad y en las reiteradas resoluciones que nos reconocen el derecho inalienable a la autodeterminación.


Abdiel Augusto Patiño, director de Expresiones, junto a Hameiduha Ahmed Mohamed, Consejero de la Embajada de la RASD en Panamá.
La relación con España

España no puede eludir sus responsabilidades históricas, políticas y hasta éticas con el pueblo saharaui; fue un mal colonizador y peor descolonizador.  Los tristes y lamentables acontecimientos del Aaiun han removido la conciencia de la mayoría en España y la condena ha sido contundente a nivel de la sociedad civil y los partidos políticos.  Echamos de menos un pronunciamiento mas firme por parte del gobierno español.

Debo reconocer que a nivel popular las relaciones son magnificas, existen varias asociaciones de amistad y solidaridad con el pueblo saharaui que se manifiestan constantemente a favor de nuestra causa.  El senado español condenó la brutal agresión a la población civil y pide que se haga una investigación.

Frente a la Unión Europea y Estados Unidos

El Parlamento Europeo, en una resolución reciente, condenó la actitud de las autoridades de ocupación marroquí, que Irritó al gobierno de Marruecos

Los Estados Unidos mantiene con Marruecos buenas relaciones pero debemos reconocer que apoya - o eso es lo que declara -, una solución mutuamente aceptada por las partes, en este caso Marruecos y el Frente POLISARIO.


Marruecos y los países que reconocen a la RASD

Marruecos aplica la política del chantaje, pero no funciona sobre los países serios.  En Venezuela, por ejemplo, estaban las embajadas de Marruecos y  de la Republica Saharaui, pero Marruecos quiso presionar al gobierno de Venezuela, que nos apoyaba claramente; y al no poder hacerlo, decidieron retirar su embajada ante Caracas y moverla a República Dominicana.  En México, Sudáfrica, Nigeria, Angola, Argelia y otros países están las dos embajadas.

Hay gobiernos que se dejan chantajear, pues Marruecos les promete inversiones importantes, lo que no puede cumplir, pues no tiene como; Marruecos solo tiene tomates e inmigrantes; es un país que no tienen nada que ofrecer.  Pero hay países que no conocen la realidad marroquí y se dejan llevar.  Por fortuna la mayoría han mantenido la posición de respaldo invariable, desde el principio, a la RASD, como es el caso de Panamá.

Marruecos no respeta el derecho soberano de cada país de tener relaciones con el país que desee, cosa que sí respeta la RASD, pues a nosotros no nos causa molestia si un país que tiene relaciones con la Republica Saharaui, las puede tener  también con el Reino de Marruecos; eso es competencia soberana de cada país.
La Relación con Panamá… “Como pez en el agua”

Estamos muy satisfechos con la posición del Estado panameño, que se ha mantenido tal cual sin importar el gobierno de turno.  Ha sido una política de apoyo, en Naciones Unidas, en América Latina, por el cumplimiento de la legalidad a favor del pueblo Saharaui.  Panamá publicó un comunicado lamentando los sucesos violentos recientes, y haciendo un llamado a la sindéresis; y a que todo se debe resolver en el marco de la legalidad. 

Un ejemplo de las buenas relaciones:  El primer grupo de estudiantes que salió de la RASD luego de la invasión marroquí, hacia Latinoamérica, vino a Panamá; y ahora contamos con convenios educativos y culturales, que permitirán que un nuevo grupo de estudiantes venga a Panamá, a la Universidad , a continuar sus estudios.

Además, nos sentimos muy contentos en Panamá, “como pez en el agua”. Tenemos excelentes relaciones con los partidos políticos, organizaciones de la sociedad civil, sindicatos, organizaciones políticas, profesionales y estudiantiles.  La causa de la libertad del pueblo Saharaui ha calado en Panamá.  Incluso, en la Asamblea Nacional de Diputados, existe un Grupo de Amistad de Diputados con la República Árabe Saharaui, presidido por el Diputado Alcibiades Vásquez, en el que hay representación de todas las bancadas de la Asamblea.

“Panamá es un país que promete mucho, emergente, donde nos sentimos – me siento – a gusto”.

 
(*)  Se calcula que entre los desplazados, refugiados en territorios ocupados y habitantes de los territorios bajo control Saharaui, hay un total de 800,000 personas.

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