Naciones Unidas, 22 de junio de
2012 (EFE).- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, defendió hoy el
trabajo de su enviado especial para el Sahara Occidental, Christopher Ross, y
le reiteró su "total apoyo", después de que el ministro de Asuntos
Exteriores español, José Manuel García Margallo, criticara públicamente su
labor.
"Reitero el total apoyo y
plena confianza del secretario general a su enviado especial para el Sahara
Occidental", dijo el portavoz de Ban, Martin Nesirky, al ser preguntado en
su encuentro diario con la prensa sobre las palabras de Margallo en Rabat, donde
expresó por vez primera una crítica a la labor mediadora de Ross.
El titular de Exteriores
español expresó el miércoles en Marruecos su deseo de que el enviado especial
avanzara "más rápido" en el trabajo de mediación y señaló que Ross
debería centrase "en los temas centrales de ese dossier en vez de perderse
en temas accesorios".
"El secretario general
subraya que su enviado ha dado oportunidades amplias a las partes para debatir
los temas centrales durante las rondas de negociaciones informales y que, hasta
la fecha, las partes no se han movido de sus posiciones originales", respondió
este viernes Nesirky.
La polémica en cuanto a Ross
se desató en mayo, cuando Marruecos pidió a Ban que retirara a su enviado, al
considerar que no ha conseguido "ningún avance verdadero" en el
proceso de negociaciones, según dijo entonces el ministro de Comunicación y
portavoz del gobierno marroquí, Mustafa Jalfi.
Desde entonces, el secretario
general ha reiterado en distintas ocasiones su confianza en el trabajo de Ross,
mientras que el Frente Polisario ha denunciado que la actitud de Marruecos
encalla todavía más las negociaciones y pone en entredicho la autoridad tanto
de Ban como del Consejo de Seguridad de la ONU.
Marruecos nunca vio con buenos
ojos el nombramiento de Ross en enero de 2009 porque fue diplomático en Argelia,
país considerado como el principal valedor del Frente Polisario, y expresó en
varias ocasiones que sospechaba de su parcialidad.
El anterior enviado especial
para el Sahara, el holandés Peter Van Valsum, fue destituido por unas
declaraciones que se consideraron desafortunadas en las que consideraba
inviable celebrar un referéndum en el Sahara Occidental.
Las negociaciones directas
entre marroquíes y saharauis sobre el futuro de la antigua colonia española
están paralizadas ante la diferencia de posturas entre las partes.
Marruecos, que ocupó el Sahara
Occidental en 1975, tras la salida de España, sostiene que la autonomía de la
región es la única salida viable para el conflicto, mientras que el Frente
Polisario apuesta por un referéndum de autodeterminación donde la independencia
sea una de las opciones, lo que tiene las negociaciones estancadas. EFE