martes, 30 de abril de 2013

Críticas a España por legitimar el régimen marroquí en el Sáhara


Asociaciones españolas de solidaridad con el Sáhara han condenado este domingo la represión "feroz" y "brutal" ejercida el viernes por agentes de seguridad marroquíes durante una protesta en El Aaiún y han criticado al Gobierno de España por "legitimar" y "consentir" la política del régimen de Marruecos.
Cerca de una treintena de personas, entre independentistas saharauis y policías marroquíes, resultaron heridos en la protesta, convocada un día después de que Marruecos frenara en la ONU una propuesta de EEUU para que la Misión de Naciones Unidas en el Sahara Occidental tuviera por primera vez mandato para supervisar la situación de los derechos humanos en la antigua colonia española.
En sendos comunicados, la Delegación Saharaui para España y la Coordinadora Estatal de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS-Sáhara) recriminan al Ejecutivo español que defienda y consienta el talante "provocador" y "retador" del régimen marroquí.
CEAS se dirige concretamente al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, a quien critica que se "emboscase" tras las posiciones de Rusia y Francia para justificar su rechazo a la propuesta de EEUU.
La coordinadora estatal atribuye a esa "falta de compromiso" la intervención "bárbara y desproporcionada" de la gendarmería marroquí contra los manifestantes saharauis.
"¿Acaso no se podía imaginar el sr. ministro lo que podía pasar?", pregunta y advierte de que "cada nuevo día que se produzca una coacción, un acto de violencia desproporcionada, una detención ilegal, una tortura, una víctima (...), le recordaremos a él y a todo nuestro Gobierno la responsabilidad contraída con su apoyo a Marruecos".
También pregunta si García-Margallo se preocupará a partir de ahora de los derechos humanos vulnerados en los territorios saharauis ocupados o "¿seguirá callando cínicamente?".
La Delegación Saharaui para España se suma en su nota a la condena de estas "graves violaciones" de los derechos humanos y las libertades de manifestación y reunión y apela a la comunidad internacional a velar por el cumplimiento "escrupuloso y cabal" de las resoluciones de Naciones Unidas respecto al Sáhara Occidental.