*Fuente: Observadora internacional en el Sahara ocupado
El día de muerte de Mahfud Ali Baiba fue uno de los días más tristes de mi vida y la de mis compañeros, porque él era y sigue siendo el ideal de muchos jóvenes saharauis. Mahfud no era una persona normal, era un hombre que personificaba el saharaui simple y modesto con sus ciudadanos y sus compañeros, pero duro con sus enemigos. Fue un fiel luchador hasta el final para defender la dignidad de su pueblo, que consideraba su dignidad propia, sabio, tranquilo y que amaba a los demás. Por eso decimos que Mahfud representa la personalidad saharaui en todas sus dimensiones: sus sufrimientos, sus esperanzas, sus sueños, sus fracasos y sus triunfos. Por todo eso a los saharauis nos duele tanto su partida repentina, y les duele también a todos nuestros compañeros que están luchando con nosotros, porque Mahfud ha muerto defendido los mismos principios en que creen los amigos del pueblo saharaui.
Así y después de la difusión de la noticia en la noche del viernes, muchos saharauis visitaron a su familia para darle el pésame y expresar su solidaridad con sus familiares. Allí había muchos elementos de seguridad marroquí que llevaban las ropas oficiales, pero también como siempre, había otros vestidos de civiles, además los hombres de la inteligencia marroquí se mezclaron entre los saharauis. De todos modos, las visitas seguían el domingo, en el que los saharauis en los campamentos de los refugiados celebraban el funeral de Mahfud.
Como Mahfud ha muerto en otro país que no es el suyo, en el Islam hay una práctica religiosa para celebrar el funeral de una persona que murió en un lugar lejos de su país y de sus parientes. Esta práctica se llama "Oración de Ausente". Los saharauis de los territorios ocupados decidieron hacer esta Oración por el alma de Mahfud al lado de la casa de su familia que está en el barrio "Hay Al matar" el domingo 04 de julio.
El domingo la gente empezó a llegar desde las siete de la mañana a la puerta de la casa. Otros activistas y yo mismo llegamos a las nueve y nos encontramos con que las fuerzas de seguridad marroquí bloqueaban todas las entradas de la casa de familia de Mahfud. Quisimos entrar para ayudar a sus hermanos y sus parientes en la organización de la práctica, el sitio para las personas en el lugar de la Oración. Por exigir la celebración, uno de los elementos de seguridad rechazó esa posibilidad y nos decía que las condolencias habían terminado anoche y ayer, pero uno de mis compañeros, Salama, le respondió que íbamos a hacer la Oración por el alma del mártir y el elemento de seguridad marroquí, totalmente enfadado, decía que "no hay Oración y él (por Mahfud) no es un mártir y marcharos de aquí que sino la policía va a torturarte a ti y a y todos los que van a hacer la “Oración de Ausente".
En este momento llegó el hermano de Mahfud, que se llama Sidi Mohamed, e intentó entrar a casa de su familia pero la policía lo rechazó una y otra vez, y eso nos sucedía a todos los saharauis que queríamos presentar nuestras condolencias y ayudar a preparar la Oración. En la casa sólo estaban algunas mujeres y los parientes que estaban allí desde el viernes, el día de su muerte.
Al final, después una lucha pacifica, y cuando se fueron agrupando muchos jóvenes cerca de la casa la policía aceptó que entráramos a la casa, eran casi a las once de la mañana, sin embargo muchos de los policías se mezclaban con los saharauis que quisieron hacer la Oración para prohibirla y, paso a paso, los marroquíes provocaron a los saharauis cuando rechazaron de una manera oficial el hecho de la Oración, porque ellos daban a la práctica un sentido político y por eso no nos permitían a los saharauis ejercer nuestros derechos religiosos, aparte de los políticos.
Por último, la mitad del domingo finalizó con confrontaciones entre nosotros y la policía marroquí, que con barras y materiales de tortura cargó contra los saharauis, por lo que hubo muchos heridos entre los hombres y las mujeres.
S. / El Aaiun, territorios ocupados del Sahara Occidental.
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