jueves, 18 de noviembre de 2010

México premia a Aminatou Haidar





Aminatu Haidar galardonada con el Premio Internacional Caballo de Troya de guacales


México, 19/11/2010 (SPS).-La activista saharaui de los derechos humanos Aminatu Haidar, ha sido galardonada este jueves, con el Premio Internacional Caballo de Troya de guacales en el lanzamiento de la propuesta nacional e internacional para instaurar el 18 de noviembre como "Día de las Mujeres Revolucionarias", según un comunicado de la embajada saharaui en México.

La ceremonia de entrega del premio fue celebrada en el Espacio de Arte Público de Radio UNAM, en el jardín aledaño a éste, con la presencia de personalidades mexicanas, la embajada saharaui en México, la Asociación mexicana de amistad con la RASD, durante la misma se habló de la vida de Dolores Jiménez y Muro, la activista Lubna Masarwa y la defensora de los derechos humanos saharaui, Aminatu Haidar.

La entrega del premio que fue recogido por el Ministro Consejero Ahmed Mulay Ali, donde se logró contactar a Aminatu Haidar por teléfono, quien dirigió un mensaje de agradecimiento a México y a los mexicanos. A su Gobierno, Senado, Diputados, partidos y la sociedad civil en general por todo el apoyo que dieron y dan a la causa saharaui.

Aminattu Haidar, fue expulsada del Sahara Occidental por las autoridades marroquíes en diciembre de 2009, y permaneció 32 días en huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote (islas canarias). Donde ha habido una flagrante violación del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Político.

Convertida en "uno de los símbolos" de la lucha del pueblo saharaui por su derecho a la autodeterminación y a la independencia, la apoyan varias organizaciones, especialmente Amnistía Internacional, Human Rights Watch, la Organización Mundial Contra la Tortura y el Comité Español de Ayuda a los Refugiados.

Aminattu Haidar, ha sido galardonada con diferentes premios internacionales, tales como: La Fundación Robert F. Kennedy premió a Aminetu Haidar por su labor a favor de los Derechos Humanos, galardón que fue entregado en el Senado de los Estados Unidos (1998). Premio de Derechos Humanos Juan María Bandrés (2006). por su defensa del derecho de asilo y la solidaridad con los refugiados, que le fue concedido por la Comisión Española de Ayuda a los Refugiados (CEAR). Solidar Silver Rose Award (2007). Con el que la organización austriaca Volkshife Ostseriech distingue anualmente a los defensores de los Derechos Humanos de todo el mundo. Premio de Derechos Humanos Robert F. Kennedy (2008). por su compromiso "con la no violencia y la resistencia pacífica" en defensa de los Derechos Humanos. Premio al coraje civil de la Fundación Train (2009). Premio Internacional Jovellanos Resistencia y Libertad (2010). Premio Dolores Ibárruri (2010).

Aminetu Haidar

Casi todo el mundo está de acuerdo en que para mejorar salud del presente es bueno, e incluso aconsejable, echar de vez en cuando una ojeada al pasado, a la historia. Y la situación de la luchadora Aminattu Haidar no es una excepción. Militante saharaui pro Derechos Humanos. La figura de Aminetu Haidar ha alcanzado relevancia a nivel mundial.
Aminetu Ali Ahmed Haidar, madre de dos hijos, Hayat y Mohammed, nació en 1967 en El Aaiún, donde hizo sus estudios primarios y secundarios y obtuvo un bachillerato en literatura moderna, hizo otros estudios como:
-           COU, ciencias experimentales (antes de su secuestro en1987)
-           Estudios de literatura contemporánea, iniciados después de su liberación en 1991 y finalizados en 1994 en El Aaiún, Sahara Occidental.
-           Primer año de carrera universitaria de Filosofía y Humanidades. 2000-2001
-           Diplomada en Informática. 2001-2003
-           Prosigue sus estudios a distancia desde la Cárcel Negra de El Aaiún
-           2º Curso en la Facultad de Gestión y Administración de Empresas, obteniendo la mejor nota de su curso. Aprobó todos los exámenes finales desde la cárcel.

Aminetu Haidar percibió desde muy joven que algo anormal sucedía en su entorno. Pese a su temprana edad oía los comentarios de sus más allegados sobre el drama de los miles de saharauis que marcharon del territorio buscando un lugar seguro a causa de la guerra que estalló en el Sahara tras la invasión de Marruecos y Mauritania. Entre ellos se encontraban varios de sus familiares. También oía hablar de familiares que estaban detenidos en las cárceles marroquíes. Como el resto de las niñas saharauis en los colegios, sintió discriminación por parte de los profesores y alumnos marroquíes por su condición de saharaui. Esta situación originó en ella un sentimiento de rechazo hacia la injusticia. Los profesores falsificaban las notas de los estudiantes saharauis, los insultaban, amenazaban. Les insultaban diciéndoles “Sois saharauis, pastores, que no sabéis más que del pastoreo de las cabras y los dromedarios. No merecéis las notas del resto de compañeros” y otras frases vejatorias.

A los 14 años de edad empezó a negarse a cantar el himno marroquí en el colegio y en los festejos nacionales marroquíes. Aminetu comenzó a hacer preguntas a un familiar mayor que ella, hallando la incógnita que no conocía. Así descubrió que había una causa nacional justa y legal y que merecía la pena cualquier sacrificio por ella. Había que enfrentarse al ocupante marroquí para la liberación del Sahara Occidental.

 A los 17 años se incorpora a la actividad política, adquiriendo una mayor responsabilidad por su causa, captando jóvenes de su familia en torno a la lucha del pueblo saharaui. El 20 de noviembre de 1987, a los 20 años de edad, participó en una manifestación por la venida de una Misión Visitadora de Naciones Unidas y la Unión Africana, encabezada por Abderrahim Farah. Tras esta manifestación desaparecieron muchos ciudadanos saharauis, secuestrados por las autoridades de ocupación marroquí. Aminetu Haidar desapareció durante cuatro años, sin que se conociera su paradero.
Tras ser liberada en 1991, continuó su lucha contra las violaciones de los Derechos Humanos en los territorios ocupados del Sáhara Occidental por lo que fue de nuevo detenida en varias ocasiones por sus actividades pacíficas en defensa de los Derechos Humanos. Aminetu Haidar fue liberada el 17 de enero de 2006 de la Cárcel Negra de El Aaiún tras haber estado allí internada durante siete meses.
En diciembre de 2009, Aminattu Haidar  estuvo 32 días en huelga de hambre al ser retenida contra su voluntad por las autoridades españolas en el aeropuerto de Lanzarote. Anteriormente había sido expulsada de su tierra por las autoridades marroquíes, autoridades herederas de los sanguinarios Mulay Rachid, Mulay Ismail y Hassan II. En todos los casos, ha habido una flagrante violación del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Político.
Convertida en "uno de los símbolos" de la lucha del pueblo saharaui por su derecho a la autodeterminación y a la independencia, la apoyan varias organizaciones, especialmente Amnistía Internacional, Human Rights Watch, la Organización Mundial Contra la Tortura y el Comité Español de Ayuda a los Refugiados.
Por su lucha por el reconocimiento de los derechos de los saharauis ha sido galardonada con diferentes reconocimientos internacionales, tales como:
•          La Fundación Robert F. Kennedy premió a Aminetu Haidar por su labor a favor de los Derechos Humanos, galardón que fue entregado en el Senado de los Estados Unidos (1998).
•          Premio de Derechos Humanos Juan María Bandrés (2006). por su defensa del derecho de asilo y la solidaridad con los refugiados, que le fue concedido por la Comisión Española de Ayuda a los Refugiados (CEAR).
•          Solidar Silver Rose Award (2007). con el que la organización austriaca Volkshife Ostseriech distingue anualmente a los defensores de los Derechos Humanos de todo el mundo
•          Premio de Derechos Humanos Robert F. Kennedy (2008). por su compromiso "con la no violencia y la resistencia pacífica" en defensa de los Derechos Humanos.
•          Premio al coraje civil de la Fundación Train (2009).
•          Premio Internacional Jovellanos Resistencia y Libertad (2010).[5]
•          Premio Dolores Ibárruri (2010).
Cabe señalar que escritores galardonados con el premio Nobel -el alemán Günter Gras, el italiano Darío Fo y el portugués José Saramago-, han hecho escuchar sus voces en apoyo a esta gran mujer y con ella la lucha de un pueblo, el pueblo saharaui; cineastas como Fernando León de Aranoa y Julio Medem, actores como Pilar Bardem, Concha Velasco, Victoria Abril, Javier Bardem y Penélope Cruz y músicos como Jorge Drexler, Amaral, Miguel Ríos y Joaquín Sabina. También se adhieren personalidades del mundo de la cultura de Angola, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Francia, la India, Italia, Nicaragua, Puerto Rico, El Salvador, Portugal y México, entre otros países.
Querida y hermana Aminatu:
Tu valentía y tenacidad han rendido ya frutos evidentes.  La justa causa de tu pueblo por el reconocimiento al territorio y a la independencia como República Árabe Saharaui Democrática tiene hoy una visibilidad que no se había logrado en muchos años. 

Hoy tu imagen digna empieza a derrotar el silencio cómplice.  Pese a la debilidad física, tu voz se multiplica y resuena en muchas conciencias, en muchos países, aun los más distantes.  El mundo ya no puede ignorar que hay un pueblo en el Sáhara Occidental que reclama su derecho a concluir su proceso de descolonización, obstaculizado contra la legalidad universal por el reino de Marruecos.

Viéndola con una levísima capa de maquillaje en su rostro de facciones delicadas, los labios pintados y los ojos profundos enmarcados por el khol, alta, delgada, casi etérea con su sonrisa dulce a la par que triste, envuelta en una preciosa melhfa, ahí está, en Canarias, expulsada de su tierra por los ocupantes.

Ella. La que no reconoce la autoridad de los jueces que invadieron el país de los padres de sus padres, la que se proclama saharaui porque no quiere ser marroquí, la que regresó, conscientemente, a las fauces de la fiera. ¿Cuándo prendió en su alma la semilla?
Ella. La dama siempre es más poderosa que el rey. La dama se mueve por todo el mundo, mientras el monarca está en su torre de marfil.
Ella. La madre que llora en silencio por sus niños. Ya no hay vuelta atrás. “Sacrifiqué mi vida en aras de la Libertad”. Decía.
Ella. A quien la ciudad de los manantiales la llama, las dunas y las talhas del desierto saben su nombre. Los poetas le dedican sus versos. Las piedras gritan y grita el siroco. Las olas del océano repiten sus palabras. Y los niños de la arena sonríen y sueñan con mariposas de colores cuando oyen el nombre de Aminetu Haidar.

A ella: dedicamos este premio internacional.


No hay comentarios:

Publicar un comentario