“Una injusticia a uno solo es
una amenaza hecha a todos”
Montesquieu
Madrid 03 de Junio 2013.
Por: Ebbaba Hameida Hafed.
El pasado 1 de junio, la
capital española silenció su acelerada vida mundana para deleitarse de una atmósfera
literaria de origen saharaui, una literatura que anhela Libertad y Justicia,
pero llena de ilusiones y esperanza, la esperanza de un pueblo para volver a
las orillas de su mar, y recuperar toda su soberanía nacional sobre el suelo
patrio del Sahara Occidental.
Destacados literatos saharauis
y poetas de otras nacionalidades se reunieron en la Villa de Madrid para
presentar el libro “Primavera Saharaui”, una obra literaria que los escritores
saharauis en lengua castellana dedican a los presos políticos y a la
resistencia pacífica saharaui. En una sala del bar Zanzíbar repleta de gente,
estos artistas deleitaron con recitales de comprometidos versos cargados de
sentimientos y amor patrio, poemas que gritaban Libertad.
Tras el prólogo musical del
guitarrista Fernando Blanco, que acompañaría toda la velada, el evento, fue presentado
por la periodista y escritora Conchi Moya, antóloga de este libro. Conchi
comenzó en su intervención recordando que la reacción literaria de todos estos
escritores fue una contundente respuesta al injusto desmantelamiento del
Campamento de la Dignidad Saharaui “Gdeim Izik”, el detonante de la primavera
árabe. Sublevación saharaui cuyas consecuencias han sido condenas en juicios
sumarios, detenciones a presos políticos saharauis, asesinatos y desapariciones
de la población saharaui por parte del Gobierno marroquí. La periodista recordó
que esta obra tiene un fin solidario con las familias de los más de sesenta
presos políticos saharauis, quienes ya han sido las beneficiarias de lo recaudado
por la venta de esta obra.
Por su parte en su
intervención el escritor Bahia Mahmud Awah, para recordar el rol del verso
comprometido citó los poetas Mahmud Darwich y Beibuh El Hach, y dijo que
Darwich explico la eficacia de la poesía en estos términos “la poesía puede ser
considerada como demasiado débil, un juguete que se arroja contra los rifles,
pero a menudo es tan buena como la dinamita, cristaliza posiciones políticas
mediante líneas que, memorizadas por los viejos y los jóvenes, fortalece la
resistencia popular y proporciona eslóganes comunes”.
Bachir Ahmed, recordó aquel
grupo de los veintiún intelectuales españoles que en los años ochenta visitaron
el Sahara y se comprometieron con la lucha del pueblo saharaui entre los que el
intelectual Saharaui, recordó, José Agustín Goytisolo, Javier Reverte, Emilio
Sola, Ángel Alda entre otros. Las intervenciones dieron paso a la recitación de
poemas de Mario Benedetti dedicados al pueblo saharaui y otros relatos y poemas
de los escritores y poetas saharauis que componen el corpus de esa antología
Saharaui.
En este día tan emotivo no
podían faltar los amigos del pueblo saharaui, y entre ellos algunos destacados
escritores solidarios como Gonzalo Maure, Eduardo Soto Trillo, Willy Veleta,
Sagrario Núñez y amigos del movimiento solidario como, Ángela Carrillo, Antonia
Pons, Esperanza Jaén. Esta última, dedicó un bello poema a los presos políticos
y a la lucha del pueblo saharaui, en un claro ejemplo de la simpatía y
solidaridad que el pueblo español profiere a la lucha de su hermano pueblo
saharaui. Posteriormente, referentes autores como Bahia Awah, Bachir Ahmed
Aomar, Zahra Hasnaui y Sukeina Ali Taleb, recitaron algunos de sus poemas y los
de sus compañeros ausentes incluidos en esta obra. Estos recitales junto a la
profundidad de los versos provocó en el público la sensación de sentir la brisa
del mar del Sahara Occidental, sus dunas y el calor de su desierto.
En esta obra los intelectuales
saharauis fueron capaces de transformar la rabia y la impotencia de la
injusticia que sufre su pueblo en dulces poemas cargados de esperanza y amor.
Todos ellos sienten la necesidad de escribir, de hacer visible la causa por la
que lucha su pueblo utilizando esta poderosa arma que es la literatura,
marcando así la historia literaria de su pueblo.
Estos autores, han logrado una
simbiosis de la tradicional literatura oral de las gentes del desierto con la
literatura hispana; este hecho llama la atención por el contexto geográfico de
donde provienen los autores, entre países como Marruecos, Argelia y Mauritania
de influencia francófona, los saharauis, primero por influencia de su
metrópoli, España, y después por relaciones de la RASD con países
iberoamericanos que acogen a estudiantes saharauis, tienen una clara influencia
en su modo de entender este arte, con versos en castellano cargados de
descripción en un retrato nítido de la realidad.