Fuente: Contramutis: Alfonso Lafarga.- 18 de mayo de 2017
¿”Donde están los Derechos Humanos”? y
“Marruecos culpable, España responsable” son algunos de los eslóganes que más
se pronuncian en las concentraciones pro saharauis y que cada vez oyen más
lejos en la embajada marroquí en Madrid, como ocurrió en la tarde del jueves 18
de mayo de 2017.
Por segunda vez en dos meses el movimiento
solidario con el pueblo saharaui (CEAS-Sáhara) convocó una concentración ante
la sede de la representación diplomática de Marruecos en España, en el número 179 de la calle de Serrano de
Madrid, para pedir la libertad de los presos políticos saharauis, en este caso
la de los 24 reclusos a los que juzga un tribunal marroqui desde el 23 de enero
en Salé, cerca de Rabat, en lo que se califica como un “juicio farsa”.
Estos presos, que llevan ya seis años en
prisión, fueron condenados en 2013 por un tribunal militar a sentencias de 20
años a cadena perpetua, juicio que tuvo que ser anulado, en relación con el
campamento reivindicativo de Gdeim Izik, desmantelado por las fuerzas de seguridad
y el ejército marroquí en noviembre de 2010 a las afueras de El Aaiún, capital
de la excolonia española.
Si el 13 de marzo pasado la concentración
fue autorizada frente al número 175, y no el 179, de la calle de Serrano, en
esta ocasión no se dejó pasar del 173, desde donde gritos como “esta embajada
esta ensangrentada” o Marruecos asesina, España patrocina” suenan cada vez más
lejos de la representación diplomática.
Los allí congregados, hombres saharauis con
la darraá y mujeres con la melhfa, prendas típicas de su pueblo, así como
integrantes del movimiento solidario español, insistieron en dar vivas a la
lucha del pueblo saharaui y en gritar “Sahara libertad, Polisario vencerá”.
En el comunicado que leyó la abogada
saharaui Fatma Elghali, de la Asociación Profesional de Abogados Saharauis en
España (APRASE), que asistió recientemente como observadora internacional a
varias sesiones en el tribunal de Salé, se recuerdó que el juicio militar de
2013 fue denunciado por observadores internacionales y organizaciones de
defensa de los Derechos Humanos por irregularidades en el proceso, falta de
garantías para los acusados, ausencia de pruebas incriminatorias y confesiones
obtenidas bajo tortura.
También destacó “la ilegalidad de juzgar en
territorio marroquí a ciudadanos saharauis por algo que ocurrió en el Sáhara
Occidental”, territorio que como recoge
una reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea “no forma
parte del Reino de Marruecos”, por lo que este país no tiene ninguna soberanía
sobre él.
Pero
“el Tribunal marroquí sigue negando la libertad provisional para los
presos, cuyo único delito ha sido ser saharauis y defender los derechos de su
pueblo en su propio territorio”, pueblo que lleva más de 40 años luchando por
volver a su tierra y que se celebre el referéndum de autodeterminación para
poder decidir libremente su futuro.
Se dijo, también, que “Marruecos demuestra
una vez más que su única razón es la fuerza” y utiliza los tribunales para
vulnerar los derechos de la población saharaui, que lucha “contra la ilegal ocupación de su
país”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario