En el férreo instante de tu libre determinación, mi corazón y mi razón deciden cantar, burlar los abismos de la distancia como lo ha hecho tu palabra melodiosa irremediablemente aprendida en tantos combates por la vida. Mohamed VI ni el Rey de España la pueden acallar. Tampoco las transnacionales francesas o norteamericanas o quien quiera sea ambicione el petróleo Saharaui. Tu canto resuena y echa raíces, brota y fertiliza otros cantos, sazona, con tu Diccionario Liberador, el Corazón del Mundo, donde habitamos los hambrientos y sedientos de justicia. No tengo más armas que mi canto. No tengo otras alas sino, las que mi pasión ha tejido. Con ellas quiero llegar a Lanzarote y besar la luminosidad de tus ojos para aprender a expresar la verdad de la Paz otorgada por la cordura de la razón.
Miro el mundo imbuido de ti y Eres el Mundo. Un grano de arena en el infinito Universo donde tu canto se difunde como su inconmensurable expansión. Por tanto eres de todos y todos somos tú. Todos vivimos la usurpación y el crimen y sabemos de la ambición de quienes los cometen. Todos sentimos la temible fuerza de tu autodeterminación. Todos, tempranamente, recuperaremos los territorios de los Pueblos del Planeta.
Mario Manque, Poeta del Mundo.
Miro el mundo imbuido de ti y Eres el Mundo. Un grano de arena en el infinito Universo donde tu canto se difunde como su inconmensurable expansión. Por tanto eres de todos y todos somos tú. Todos vivimos la usurpación y el crimen y sabemos de la ambición de quienes los cometen. Todos sentimos la temible fuerza de tu autodeterminación. Todos, tempranamente, recuperaremos los territorios de los Pueblos del Planeta.
Mario Manque, Poeta del Mundo.
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