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| Mohamed Salem Uld Salek, canciller de la República Saharaui, RASD |
Fuente,
Ministerio Asuntos Exteriores de la República Saharaui
La
Comunidad internacional acaba de reafirmar, a través de la aprobación unánime
del proyecto de resolución sobre el Sahara occidental, su firme apoyo al
derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación e independencia en
conformidad con los principios y resoluciones de la ONU.
La
resolución fue precedida este año de numerosas intervenciones de países y
conjunto de países que se han sucedido en la tribuna para proclamar que la
cuestión del Sahara occidental es un problema derivado de la persistencia del colonialismo en AFRICA que debe ser
resuelto mediante el ejercicio por parte del pueblo saharaui de su derecho
inalienable a la independencia. Es así como el conjunto de los países de
América latina y del Caribe agrupados en el marco de la CELAC (Comunidad de
Estados Latinoamericanos y del Caribe),
el conjunto de los países miembros del Caribe (CARICOM), y un alto número de
Estados expresaron de forma unilateral su apoyo a la lucha por la libertad del
pueblo saharaui, entre los que figura
Argelia, Sudáfrica, Nigeria, Botsuana, Lesotho, Angola, Uganda,
Tanzania, México, Ecuador, Cuba, Nicaragua, Costra Rica, Honduras, Pakistán.
El apoyo
africano a la descolonización del Sahara Occidental a través de un referéndum
de autodeterminación para el pueblo saharaui, ha sido de nuevo consagrado por
las Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en los meses de enero y
mayo de este año.
En este
contexto y a pesar de la persistente y conocida posición colonialista de
Francia, la Unión Europea, ha manifestado “su apoyo a una solución justa y
duradera que garantice el derecho de pueblo del Sahara Occidental a la
autodeterminación.”
La IV
comisión tuvo también ocasión para oír a destacados representantes de la
sociedad civil internacional venidos de todas partes del mundo, que ilustraron
a la Comisión sobre la base de testimonios recogidos sobre el terreno sobre la
gravedad de la situación creada por la ocupación ilegal de Marruecos,
particularmente, en lo que concierne a la política de violación de derechos
humanos y el saqueo de las riquezas naturales saharauis por la potencia
ocupante.
Este año
como en los precedentes, las tesis planteadas por la potencia ocupante del
Sahara Occidental no han logrado nuevos adeptos, quedando patente el
aislamiento internacional de las mismas , lo que confirma las confesiones contenidas en las
recientes declaraciones al más lato nivel en Marruecos donde se reconoce que
“la situación es difícil”.
La decisión
adoptada por la IV Comisión de la ONU tiene lugar en el momento en que el
Enviado personal del S.G. de la ONU, Christopher Ross redobla sus esfuerzos en
el marco del mandato que le ha sido definido por el Consejo de seguridad
consistente en asegurar una solución justa y duradera que “garantice al pueblo
saharaui su derecho a la autodeterminación”.
Tiene
también lugar en el momento en que se levantan más voces en Europa y se
elaboran más informes en denuncia de la violación por Marruecos de los derechos
humanos en las zonas ocupadas y en rechazo al saqueo de las riquezas naturales
de nuestro país.
La ONU, al
adoptar esta resolución para la descolonización del Sahara occidental y
liberarla de la ocupación de Marruecos, muestra coherencia con la resolución de
la Asamblea general de 2010 en virtud de la cual, la erradicación total del
colonialismo debe ser el objetivo de esta década.
El Gobierno
saharaui y el Frente Polisario expresan con esta ocasión su sincero agradecimiento
a todos los países que han manifestado una vez más su apoyo a la causa justa de
nuestro pueblo.