España ha admitido a trámite la petición de asilo a solo cinco de los 22 extranjeros que el pasado 5 de enero llegaron en patera a Canarias. Mohamed Salem, portavoz del Frente Polisario, que hace dos días aseguró que sólo 13 de los 22 eran saharauis ha confirmado que estos cinco pertenencen a ese grupo y valora la noticia como "parcialmente buena", aunque espera que los otros ocho "puedan salir también en los próximos días de las garras del ocupante marroquí".
La admisión a trámite significa que estos cinco reciben un permiso temporal de estancia en España mientras se decide sobre la concesión de asilo, un proceso que suele alargarse entre 12 y 18 meses, a pesar de que el plazo legal se reduzca a solo seis meses.
El resto, cuyas solicitudes han sido rechazadas, pueden pedir un reexamen para que sus peticiones sean revisadas por la Oficina de Asilo y Refugio, que debería responder como muy tarde el lunes. CEAR ya ha confirmado que sus servicios jurídicos estarán en disposición de efectuar el trámite para todos los que así lo deseen.
Los 22 están internados en el Centro del Internamiento de Extranjeros de El Matorral (Fuerteventura). Mohamed-Salem Daha, delegado del Frente Polisario en Canarias, visitó a dos de ellos ayer por la tarde y asegura que solo 13 son realmente saharauis y estos sí son víctimas de la persecución de Marruecos por su participación en el campamento Gdeim Izik. La buena noticia para ellos es que estos cinco pertenecen a ese grupo, aunque Salem ha querido incidir en el hecho de que ellos no niegan que los marroquíes que también viajaban en la patera también sean víctimas de la persecución de su gobierno. "Todo lo contrario, son un pueblo hermano que también padece la persecución de un régimen dictatorial y sanguinario, y les deseamos lo mejor, pero nosotros representamos a los saharauis".
A pesar de que el Frente cree que destrás de la salida de esta patera está el propio Gobierno marroquí, que habría hecho "la vista gorda" con la intención de seguir debilitando la resistencia saharaui en los territorios ocupados -de hecho, Salem asegura que los propios ocupantes de la patera les relataron cómo el ejército custodió prácticamente la salida de la misma- y de que es algo que no favorece a la causa -"nosotros queremos que nuestros jóvenes estén en el territorio, luchando"- considera que a estos que ya están aqui, y que si regresan, van a ser, seguro, víctimas de la represión "hay que ayudarles a buscar un futuro en un país democrático". Según Salem, después de conocerse la noticia de que sólo se ha admitido a trámite la petición de cinco de ellos, las madres del resto han empezado a llamar por teléfono. "Nos piden llorando que por favor, no vuelvan, que los matarían".
No hay comentarios:
Publicar un comentario