*Fotos: víctimas de la represión marroquí contra los saharauis que recibían a Aminetu Haidar a su llegada a El Aaiun
Represión contra el activista saharaui Hmad Hamad por reunirse con periodistas españoles.
El Aaiun / Sahara Occidental. 20 de diciembre de 2009
*Fuente: CODAPSO (Comité de defensa del derecho a la autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental)
El régimen marroquí no deja de aumentar la violación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. Ocurre a todos los niveles: militantes, activista de los derechos humanos o población civil saharaui. También lo han sufrido los periodistas españoles que estaban invitados a un desayuno en casa del activista Hmad Hamad, vicepresidente de CODAPSO esta mañana. Se de los periodistas: Luis de Vega del periódico español ABC, Nicolás Castellanos de la Cadena Ser, y Erena Calvo enviada del periódico El Mundo.
Hacia las 10h 30 de la mañana una brigada de policía marroquí llegó al domicilio de la familia Hamad y le ordenaron no recibir más a ningún extranjero en su domicilio, y si se atrevía a hacerlo debía pedir primero autorización policial primero. También indicaron que los periodistas debían irse a su hotel. Esta actuación es contraria a los derechos humanos e incluso a la legislación marroquí, que en diferentes artículos autorizan a los ciudadanos el derecho a la libertad de circulación, de opinión y a la inviolabilidad de sus hogares.
ARTÍCULO 9.
La constitución garantiza a todos los ciudadanos:
- La libertad de circular y de establecerse en cualquier lugar del Reino;
- La libertad de opinión, la libertad de expresión bajo todas sus formas y la libertad de reunión;
- La libertad de asociación y la libertad de adherirse a cualquier organización sindical y política de su elección.
Se puede limitar el ejercicio de estas libertades sólo por la ley.
ARTÍCULO 10.
- Nadie puede ser detenido o castigado salvo en los casos y las formas previstos por la ley.
- El domicilio es inviolable. Los registros o las comprobaciones sólo pueden ocurrir en las condiciones y las formas previstas por la ley.
ARTÍCULO 11.
- La correspondencia es secreta.
Esto está escrito en la legislación marroquí y lo que cometen las fuerzas marroquíes en el Sáhara Occidental son violaciones de derechos humanos. Extrema esquizofrenia del estado de Marruecos.
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Hmad Hamad: "Aminatu Haidar está prácticamente secuestrada"
Acn Press. El Aaiún 20/12/2009. Son las diez de la mañana. Las puertas de la casa del activista Hmad Hmad, vicepresidente del Comité Saharaui de Defensa del Derecho de Autodeterminación (Codapso), están abiertas para recibir a los periodistas. Un gran desayuno les espera en la mesa.
Nada más comenzar la conversación, el saharaui se lamenta de la fuerte presión que sufren "normalmente, pero mucho más estos días tras el regreso de Aminatu Haidar a El Aaiún", capital administrativa del Sahara Occidental y de la ex colonia española.
A Aminatu, se queja indignado, "la tienen prácticamente secuestrada; lo que le están haciendo es a todas luces un arresto domiciliario". Ni él ni muchos otros activistas y familiares han logrado todavía asomar las narices por casa de la activista, que hacía su entrada triunfal en El Aaiún en la noche del jueves, tras una dura huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote.
Tampoco los periodistas pueden acceder a la vivienda de la que sus seguidores apodan la Ghandi saharaui. "No quieren que seáis testigos de nuestra situación; su objetivo, el de las autoridades marroquíes, es que no tengamos voz", dice Hmad Hmad.
"Son los policías"
Sin a penas probar el café, alguien empieza a tocar a la desesperada en la puerta de la casa de la casa de Hmad, en el barrio de Hay Villas. "Son ellos, los policías", nos advierte. Tras un breve intercambio de palabras, nos comunica que "os piden una autorización para poder estar aquí".
Sin ningún tipo de violencia ni prácticamente contacto entre los policías y los periodistas, nos queda claro que debemos abandonar su hogar. "Ya sabéis –dice Hmad- podemos tener problemas, mi familia puede tenerlos, si seguís aquí". Esta corresponsal, acompañada de un periodista de la Cadena Ser y otro de ABC, abandona entonces la casa del activista, otra de tantas en El Aaiún en las que la prensa no está invitada a entrar.
Represión contra el activista saharaui Hmad Hamad por reunirse con periodistas españoles.
El Aaiun / Sahara Occidental. 20 de diciembre de 2009
*Fuente: CODAPSO (Comité de defensa del derecho a la autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental)
El régimen marroquí no deja de aumentar la violación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. Ocurre a todos los niveles: militantes, activista de los derechos humanos o población civil saharaui. También lo han sufrido los periodistas españoles que estaban invitados a un desayuno en casa del activista Hmad Hamad, vicepresidente de CODAPSO esta mañana. Se de los periodistas: Luis de Vega del periódico español ABC, Nicolás Castellanos de la Cadena Ser, y Erena Calvo enviada del periódico El Mundo.
Hacia las 10h 30 de la mañana una brigada de policía marroquí llegó al domicilio de la familia Hamad y le ordenaron no recibir más a ningún extranjero en su domicilio, y si se atrevía a hacerlo debía pedir primero autorización policial primero. También indicaron que los periodistas debían irse a su hotel. Esta actuación es contraria a los derechos humanos e incluso a la legislación marroquí, que en diferentes artículos autorizan a los ciudadanos el derecho a la libertad de circulación, de opinión y a la inviolabilidad de sus hogares.
ARTÍCULO 9.
La constitución garantiza a todos los ciudadanos:
- La libertad de circular y de establecerse en cualquier lugar del Reino;
- La libertad de opinión, la libertad de expresión bajo todas sus formas y la libertad de reunión;
- La libertad de asociación y la libertad de adherirse a cualquier organización sindical y política de su elección.
Se puede limitar el ejercicio de estas libertades sólo por la ley.
ARTÍCULO 10.
- Nadie puede ser detenido o castigado salvo en los casos y las formas previstos por la ley.
- El domicilio es inviolable. Los registros o las comprobaciones sólo pueden ocurrir en las condiciones y las formas previstas por la ley.
ARTÍCULO 11.
- La correspondencia es secreta.
Esto está escrito en la legislación marroquí y lo que cometen las fuerzas marroquíes en el Sáhara Occidental son violaciones de derechos humanos. Extrema esquizofrenia del estado de Marruecos.
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Hmad Hamad: "Aminatu Haidar está prácticamente secuestrada"
Acn Press. El Aaiún 20/12/2009. Son las diez de la mañana. Las puertas de la casa del activista Hmad Hmad, vicepresidente del Comité Saharaui de Defensa del Derecho de Autodeterminación (Codapso), están abiertas para recibir a los periodistas. Un gran desayuno les espera en la mesa.
Nada más comenzar la conversación, el saharaui se lamenta de la fuerte presión que sufren "normalmente, pero mucho más estos días tras el regreso de Aminatu Haidar a El Aaiún", capital administrativa del Sahara Occidental y de la ex colonia española.
A Aminatu, se queja indignado, "la tienen prácticamente secuestrada; lo que le están haciendo es a todas luces un arresto domiciliario". Ni él ni muchos otros activistas y familiares han logrado todavía asomar las narices por casa de la activista, que hacía su entrada triunfal en El Aaiún en la noche del jueves, tras una dura huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote.
Tampoco los periodistas pueden acceder a la vivienda de la que sus seguidores apodan la Ghandi saharaui. "No quieren que seáis testigos de nuestra situación; su objetivo, el de las autoridades marroquíes, es que no tengamos voz", dice Hmad Hmad.
"Son los policías"
Sin a penas probar el café, alguien empieza a tocar a la desesperada en la puerta de la casa de la casa de Hmad, en el barrio de Hay Villas. "Son ellos, los policías", nos advierte. Tras un breve intercambio de palabras, nos comunica que "os piden una autorización para poder estar aquí".
Sin ningún tipo de violencia ni prácticamente contacto entre los policías y los periodistas, nos queda claro que debemos abandonar su hogar. "Ya sabéis –dice Hmad- podemos tener problemas, mi familia puede tenerlos, si seguís aquí". Esta corresponsal, acompañada de un periodista de la Cadena Ser y otro de ABC, abandona entonces la casa del activista, otra de tantas en El Aaiún en las que la prensa no está invitada a entrar.
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