viernes, 7 de junio de 2013

Jira Bulahi en México: Generaciones completas de saharauis no conocen el mar o una ciudad

Han vivido más de 40 años en campamentos rodeados por muros, minas antipersonales y la vigilancia permanente del ejército marroquí, cuyo gobierno les niega la independencia.
México, DF. A pesar de que la República Árabe Saharahui Democrática (RASD) cuenta con mil kilómetros de costas, hay generaciones completas de sus habitantes que no han conocido el mar y otros más nunca han visto una ciudad. Esa es una de las consecuencias de vivir por más de 40 años en campamentos, rodeados por muros, centenares de miles de minas antipersonales y la vigilancia permanente del ejército marroquí, cuyo gobierno niega la independencia de RASD, a pesar de un centenar de resoluciones de la ONU, la Comunidad Europea y los países de África.
Jira Bulahi Bad, ministra de Formación Profesional y Función Pública de la RASD, señala en entrevista con La Jornada que a esta situación debe sumarse la represión del gobierno de Marruecos hacia “cualquier manifestación pacífica” de aquellos que, en los territorios ocupados por ese país, demandan un plebiscito que devolvería a la RASD el pleno dominio de los 266 mil kilómetros cuadrados –casi la mitad de Francia-, a la administración rahui.
La RASD es el único país árabe de habla hispana, producto de años de colonización española que iniciaron en 1884. Desde entonces, ha existido una lucha permanente por la independencia Saharahui que ha enfrentado a España, Mauritania y Marruecos, país este último que se niega a reconocer acuerdos internacionales y bilaterales para liberar los territorios ocupados.
Marruecos invadió el Sahara Occidental, sede de la RASD, el 31 de Octubre de 1975, en pleno proceso de descolonización y autodeterminación, desde entonces, agrega la ministra Saharahui, se ha optado por la solución pacífica de esta diferencia que impide el pleno goce de derechos del pueblo de la RASD sobre su territorio y bienes, como la minería y la explotación marítima, que controla el gobierno marroquí “a costa de la permanente violación de los derechos humanos que han llegado a extremos inimaginables por la población mundial”.
No obstante, confía en que al haber intervenido Estados Unidos por primera vez, manifestándose en 2013 a favor de la autodeterminación de la RASD, como ha ordenado la ONU y de la realización de un plebiscito que termine con la presencia marroquí, “en un futuro cercano se recuperen los territorios ocupados injustamente”.
Confió también en que la presencia de organizaciones como Amnistía Internacional o Human Rights Watch, contribuyan a llamar la atención del mundo sobre la violencia que Marruecos cotidianamente sobre la población saharaui.
“Creemos que la participación de la comunidad de naciones es fundamental para ello”, añade la ministra que en su visita a México se ha reunido con funcionarios del gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto y con legisladores, quienes le reiteraron el apoyo del país en la lucha por la liberación del pueblo saharaui.

El referéndum de autodeterminación fue aprobado por la ONU en 1991, pero ha ido aplazándose y actualmente se encuentra bloqueado debida las apelaciones de Marruecos, que se opone a la resolución a efecto de seguir manteniendo el control ilegal de regiones ricas en minerales e hidrocarburos, además de explotar las costas saharauis. México, apunta, es uno delos 80 países que reconocen a la RASD, “y siempre ha expresado su apoyo por la causa saharaui”.