sábado, 31 de octubre de 2020

La mezquina diplomacia marroquí carente de argumento discursivo en el conflicto del Sahara Occidental. El Embajador saharaui en Kenia, Sr. Bah El Mad


Fuente:
Diario La Realidad saharaui/DLRS, 31 octubre 2020

La mezquina diplomacia marroquí carente de argumento discursivo en el conflicto del Sahara Occidental. El Embajador saharaui en Kenia, Sr. Bah El Mad

La mezquina diplomacia marroquí carente de argumento discursivo en el conflicto del Sahara Occidental. El embajador saharaui en Kenia da una magistral lección a su homólogo marroquí

El Embajador de la República Saharaui, RASD en Kenia Bah El Mad a su homólogo marroquí que intenta falsear la naturaleza de la ocupación marroquí al Sahara Occidental.

Nairobi, Embajada de la República Saharaui, RASD. El pasado 28 de octubre en el periódico keniata, The Star, el representante marroquí publicó un articulo sobre el conflicto del Sahara Occidental habituado comprar portadas en la prensa, pero sin trascendencia. El representante alauita, Mukhtar Ghambou, publicó su artículo bajo "Movimientos secesionistas, la amenaza del separatismo en África”. Así de partido falsificó, tergiversó, imaginó, inventó, mintió y fantaseó en su texto, ignorando que el continente sus naciones se fundamentan en los principios anticoloniales y definen el Sahara Occidental como un anacronismo del siglo, “Ultima colonia en África”. El aforismo saharaui le dice al representante del makhzen: اللا اللي ابقيت تكذب بعد اشهودك [Si pretendes mentir aléjate de los testigos], pero esta vez, el embajador del majzén no acertó. Allí estaba el Embajador de la República Saharaui, el Sr. Bah El Mad.

En su calidad de embajador de la República Saharaui, RASD, en Kenia, el Sr. Abah Al-Mad usando su derecho de réplica, aseguró que es triste desprestigiar el talento de un profesor universitario convirtiéndose en un juglar cantando y alabando la injusticia, falsificando la historia y los principios del derecho internacional. El Sáhara Occidental ha sido un tema de descolonización en la agenda del comité de descolonización de las Naciones Unidas desde principios de la década de 1960 del siglo pasado. Desde 1975, su descolonización e independencia se han visto interrumpidas por la invasión militar de Marruecos.

No es de extrañar que las Naciones Unidas y la Unión Africana envíen una misión de mantenimiento de la paz para salvaguardar el principio de la autodeterminación y el principio sacrosanto de las fronteras heredadas de la época colonial. Los asaltos y agresiones militares nunca deben ser una ocupación legítima.

Para la comunidad internacional y en particular para África, el Sahara Occidental es la última colonia del continente y la AGNU identificó a Marruecos como fuerza ocupante en sus resoluciones 34/37 de 1979 y 35/19 de 1980.

Desde 1991, la ONU y la UA han recibido el mandato en nombre de la comunidad internacional de poner fin al conflicto y salvaguardar el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui. ¿Podría el ilustre profesor de Yale aclarar este enigma a los lectores de sus incongruentes argumentos?

La amenaza del separatismo en África

¿Se atreve el profesor de Yale a hablar con su audiencia sobre las “reivindicaciones históricas del Gran Marruecos”? Los lectores del prestigioso The Star tienen derecho a saber que, además del Sáhara Occidental, Marruecos reivindica un imaginario imperio que incluye partes de Argelia, la mitad de Malí y toda Mauritania. ¿El profesor considera que todos estos países son separatistas?

El público merece un trato más serio, merece información y datos verificados, no solo acusaciones. Las reclamaciones territoriales de Marruecos sobre el Sáhara Occidental fueron examinadas por la Corte Internacional de Justicia en 1975 y el veredicto de la Corte fue que “los documentos y la información que se le presentaron y fueron examinadas no establecen ningún vínculo de soberanía territorial entre el territorio de Sahara Occidental y el Reino de Marruecos o Mauritania. Por lo tanto, el tribunal no encontró ningún vínculo jurídico que pudiera afectar la aplicación de la resolución 1514 (xv) de la Asamblea General en la descolonización del Sáhara Occidental y, en particular, del principio de la autodeterminación por parte de las Naciones Unidas que consiste en la 'Expresión libre y auténtica de la voluntad de los pueblos del territorio'.

Se deben respetar los preceptos de la legalidad internacional

Lo cierto es que el Sáhara Occidental nunca ha formado parte de Marruecos, por lo que el Movimiento de Liberación saharaui, el Frente Polisario, no puede ser en modo alguno “separatista”.

Antes de su invasión militar de nuestro país en 1975, no se pueden encontrar pruebas de la presencia marroquí en el Sáhara Occidental. Ni en documentos, ni en edificios, ni en cementerios, en nada absolutamente.

Los padres fundadores de nuestra organización continental fueron sabios y previsores cuando incluyeron en su estatuto el respeto por las fronteras heredadas de la colonización.

Marruecos debe respetar la legitimidad internacional, la Carta de la Unión Africana y el plan de arreglo ONU-OUA de 1991 que tiene un objetivo claro y preciso, a saber, la celebración de un referéndum que permita al pueblo saharaui ejercer su derecho inalienable a la independencia.

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