miércoles, 7 de noviembre de 2012

Activistas españoles prosaharauis ocupan el consulado de Agadir y son finalmente expulsados

Desalojados cuatro españoles del Consulado de España en Agadir
Viajaron al Sahara Occidental ayer pero fueron expulsados por las autoridades
Se cumple el segundo aniversario del desmantelamiento de 'Gdeim Izik'
EL MUNDO  Erena Calvo (Corresponsal) | Rabat  07/11/2012
"Estamos dentro del Consulado de Agadir, lo hemos ocupado pacíficamente, y no pensamos movernos de aquí hasta obtener una respuesta satisfactoria por parte del Gobierno español". Al otro lado del teléfono hablaba este mediodía Jefferson Cárdenas, militante de Izquierda Unida (IU) y miembro del movimiento Solidaridad Brigadista. Uno de los más de veinte españoles que han sido expulsados en las últimas horas de El Aaiún, capital administrativa del Sáhara Occidental, o que ni siquiera consiguieron entrar en el territorio.
"Aguantaremos aquí hasta que nos respondan oficialmente a nuestras demandas o hasta que nos desalojen". Y poco después de la conversación con ELMUNDO.es, a las 15.40 hora local, Jefferson y sus cuatro camaradas españoles eran expulsados pacíficamente del Consulado por la empresa de seguridad.
Según Cárdenas, esperan una respuesta del Gobierno español "porque nos sentimos desamparados ante la expulsión de El Aaiún, y pendiente de descolonizar".
Además, "la expulsión se produce en un contexto de represión militar contra la población civil saharaui", consideró Cárdenas, quien opina que España debería posicionarse a favor de la vigilancia de los Derechos Humanos en la zona. Tanto por parte de la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum en el Sáhara Occidental (Minurso), como por parte del Estado español, "que podría ejercer esa protección".
De hecho, mañana es el segundo aniversario del desmantelamiento del campamento de protesta saharaui de 'Gdeim Izik', que se saldó con 13 muertes según el Ejecutivo marroquí, 11 de ellos de las fuerzas de seguridad. Y 24 saharauis siguen desde entonces en la cárcel de Salé, a pocos kilómetros de Rabat, a la espera de ser juzgados por la vía militar.
Los activistas demandan que España haga una protesta formal ante el Gobierno de Marruecos por "nuestra expulsión ilegal".
Cuatro noruegos fueron expulsados de El Aaiún también ayer, justo en el 37 aniversario de la Marcha Verde. Una operación con la que Hassan II se anexionó el Sahara Occidental.
Protesta de 3 de los expulsados de El Aaiún en la embajada española en Rabat
Sahara Thawra  RABAT. 7/11/2012. 17.00 HRS. Tres de los ciudadanos españoles expulsados por las autoridades marroquíes de la ciudad de El Aaiún se encuentran en Rabat, con el objetivo de denunciar lo ocurrido ante la embajada española. Habían conseguido entrar en el Sáhara Occidental en la mañana del martes 6 de noviembre, pero finalmente fueron expulsados al mediodía. El objetivo de este viaje, organizado por CEAS-Sáhara y el colectivo Sahara Thawra era permanecer en el territorio para dar testimonio de la represión que está sufriendo la población saharaui en los últimos días y ante las posibles manifestaciones de celebración del segundo aniversario del desmantelamiento de Gdeim Izik. Hasta este momento, 23 ciudadanos españoles y 4 noruegos que intentaron entrar en el territorio con el mismo objetivo han sido expulsados sin recibir explicaciones. Algunas de estas personas habrían iniciado acciones similares en el Consulado español en Agadir.
El grupo formado por Amancay Villaba, Íñigo Gutiérrez y Adrián Gallero,  va a presentar una queja formal en el Consulado de la capital marroquí, en la que denuncian lo ocurrido, y exigen explicaciones a la legación diplomática española. Después tienen previsto dirigirse a la Embajada para protestar en el mismo sentido y solicitar un encuentro con el Embajador, Alberto José Navarro González.
“No pueden acusarnos de nada, ya que en el momento de la expulsión no habíamos hecho absolutamente nada ilegal” asegura Íñigo Gutiérrez quien añade que “nuestra única misión era ejercer como observadores de derechos humanos, y nuestra expulsión evidencia que Marruecos tiene algo que ocultar en el territorio”.
Sobre las limitaciones a la libertad de circulación, los organizadores de esta misión de observación aseguran que “Las autoridades marroquíes está violando todos los tratados y convenciones de derechos humanos que se supone que ha firmado y ratificado” y añaden “El Gobierno español aplaude los supuestos avances de Marruecos hacia la democracia mientras la población saharaui es brutalmente reprimida y se prohíbe cualquier intento de investigar lo sucedido”. “Exigimos una respuesta contundente e inmediata del Gobierno español.” Los tres activistas han asegurado que no abandonarán la ciudad hasta que la Embajada española les dé explicaciones sobre lo sucedido, transmita sus quejas al Gobierno marroquí y condene lo sucedido.
En anteriores crisis relacionadas con el conflicto saharaui la expulsión de ciudadanos españoles del territorio solo ha obtenido respuestas tibias por parte de la diplomacia española. Incluso la anterior titular de Exteriores, Trinidad Jiménez tuvo que rectificar algunas declaraciones polémicas de miembros de su partido que tras acontecimientos similares legitimaban la actuación marroquí reconociendo la soberanía de Marruecos sobre el territorio.
El Sáhara Occidental sigue siendo un territorio no autónomo según la ONU, un territorio pendiente de descolonización cuya administración de iure sigue ostentando el Estado español. La soberanía de Marruecos no ha sido reconocida por ningún país, ni siquiera Francia, principal aliado del Reino alauí.
Los cinco jóvenes han realizado esta acción de protesta después de haber sido expulsados por la Policía marroquí de los territorios saharauis, donde viajaban como observadores internacionales
PÚBLICO Agadir / Madrid 07/11/2012
"Basta de fotos entre el rey de España y Marruecos, hay que pedir explicaciones por los derechos de los saharauis"
Marruecos expulsa a 18 españoles y 4 noruegos del Sáhara Occidental
Un grupo de cinco activistas españoles, de los 18 que fueron expulsados de los territorios saharauis este martes, han ocupado de forma indefinida y simbólica el consulado español de la ciudad de Agadir, en Marruecos. Con esta acción los jóvenes pretender presionar al Gobierno de España para que atienda sus tres demandas: que se haga cargo de ellos y les lleve de vuelta con sus familas; que llame a consultas al embajador marroquí para pedirle explicaciones sobre los hechos y que emita una firme condena de España a la ocupación del Sahara Occidental, tal y como declaraba uno de los activistas en una entrevista con Público este miércoles.
Estos activistas fueron expulsados el martes de los territorios ocupados del Sáhara Occidental cuando trataban de llegar a El Aiún para ejercer de observadores internacionales durante las protestas previstas para los próximos días 8 y 9 de noviembre, segundo aniversario del desmantelamiento del campamento de protesta Gdeim Izik.
Además, las mismas fuentes han informado a Público de que la misma acción va a ser repetida en el consulado español de Rabat por parte de otros activistas pertenecientes a la Coordinadora Estatal de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS) con las mismas exigencias que sus compañeros.
21 ciudadanos españoles y cuatro noruegos han sido expulsados en las últimas horas
Con otras tres expulsiones llevadas a cabo este miércoles, en las últimas horas la Policía marroquí ha expulsado del territorio del Sáhara Occidental a un total de 21 ciudadanos españoles y cuatro noruegos, informa la agencia Efe.
Según relata a Efe Carmelo Ramírez, presidente de la Federación Estatal de Instituciones Solidarias con el Sáhara, que viaja junto a Josefa Milán, concejala del Ayuntamiento de Telde, y la periodista Laura Gallego, la Policía marroquí les obligó a abandonar El Aaiún, capital administrativa del Sáhara Occidental, media hora después de llegar a la ciudad. Las autoridades marroquíes insistieron en el hecho de que "no están detenidos", pero no dieron ninguna razón que justifique su expulsión del territorio de la ex colonia española.
Ninguna fuente oficial marroquí ha querido hacer alusión a los hechos, pese a los requerimientos de los medios de comunicación.
Mañana se cumple el segundo aniversario del desmantelamiento del campamento de Gdaim Izik, que comenzó como un acto de protesta social y terminó como un acto de reivindicación independentista saharaui. Aquel suceso, que se saldó con 13 muertos (11 de ellos policías marroquíes), fue el más grave registrado durante décadas en el territorio saharaui.