Después de 38 días en huelga de hambre, los
estudiantes saharauis, presos políticos en la cárcel Oudaya, Marrakech, poner
fin a su huelga de hambre.
La administración de la prisión se retiró a
los estudiantes de las celdas donde estaban con presos de delitos comunes,
separando así este grupo y se les concedió el derecho a recibir visitas. Los 16
jóvenes se dividen ahora en dos celdas de 8 personas cada uno. Siendo
reconocido de esta forma que no se trata de presos de delito común, sino de
personas detenidas por sus convicciones políticas.
En un comunicado los estudiantes saharauis
advierten de la necesidad de mantener la presión para que puedan tener un
juicio justo, y la realización de un examen médico de los detenidos que fueron
torturados.
Recordamos que estos jóvenes son detenidos
arbitrariamente, siéndoles sistemáticamente negado el derecho a asistencia
legal y fueron sometidos a torturas y prácticas degradantes antes y después de
su detención.
Los estudiantes se encuentran detenidos en
la prisión Oudaya, Marrakech y un primer grupo de ellos entró en huelga de
hambre el 23 de marzo de 2016, grupo al que se le unieron más presos los días
25 y 30 de marzo (lista adjunta).
La salud de estos jóvenes es alarmante y 38
días sin comer les ha causado problemas graves de riñón, hipoglucemia y la
hiperglucemia, hipoglucemia y la hipertensión, pérdida de conciencia y algunos
incluso comenzaron a vomitar sangre.
Ali Shargui cayó inconsciente a los 28 días
de huelga de hambre.
Las condiciones de detención de los presos
políticos saharauis es degradante, hacinados en celdas sin un mínimo de
higiene, sin ventilación, sin disponer de alimentación con nutrientes básicos
esenciales y sujetos a la violencia arbitraria diaria de los guardias y
administración de prisiones.
La tortura se aplica sin ningún otro
propósito que para establecer el terror.
Los jóvenes estudiantes piden a la
comunidad internacional que siga prestando atención a su situación y exija un
juicio justo con derecho a representación legal.
Las dos concesiones hechas por la dirección
de Oudaya en la cárcel, no van más alla de la aplicación de la ley ya existente
pero que nunca se había puesto en práctica.
Los derechos de visita a pesar de estar
reflejados en la legislación marroquí se conceden sólo cuando las autoridades
lo consideran oportuno. Es una práctica común negar arbitrariamente el derecho
de visita a familias que tienen que recorrer más de 1000 km para este fin.
La falta de procedimientos legales
transparentes ha sido denunciada sistemáticamente por los observadores
internacionales. Fundación Sáhara Occidental acreditó en los últimos años más
de 40 observadores de varios países que asistieron a los juicion y emitió
relatorios donde se puede verificar las ilegalidades cometidas contra los
saharauis.
Los observadores indican que nunca hay
evidencia de los supuestos actos cometidos a no ser que las confesiones sean
obtenidas bajo tortura y las pruebas de inocencia no son aceptadas por los
jueces, los acusados son secuestrados de sus casas o de la calle sin una orden
de detención y de búsqueda, son transferida al territorio marroquí, siendo
víctimas, por lo tanto, de secuestros internacionales ya que son residentes del
territorio no autónomo del Sahara occidental. Los juicios son nulos en virtud
de la ley y extraterritorial, incluso como sucedió coen el grupo de Gdeim Izik
que siendo civiles fueron juzgados por una tribunal militar lo que hace que
todo el proceso sea ilegal. Las condenas de los presos políticos saharauis van
desde los 4 meses hasta la cadena perpetua.
Lista de estudiantes que estaban en huelga
de hambre:
En huelga del 23 de marzo a 29 abril: Ahmed
Ali Mohammed Abba Rgueibi, Ali Mohammed Shargui Dada Beijna Omar Ibrahim
Almasih
En huelga del 25 de marzo a 29 abril: Hamza
Rami Salek Baber Aziz Aluahidi Wafi Olwakari Omnkur Nasser Mustafa Burkah
En huelga del 30 de marzo a 29 abril: Omar
laadjni
En huelga del 23 de de marzo al 21 de
abril: El Kantaoui Albar (debido al peligro para vida puso fin a la huelga el
21 de abril)
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